THE KINKS (SOMETHING ELSE BY THE KINKS) 1967

Hay muchas formas de hacer Música, y muchas más de intentarlo, pero cuando los genios sienten la inspiración corriendo por sus venas, salen cosas como esta.

Soy mucho, pero muchísimo de The Kinks y podría elegir unos quince discos del combo para sacar piezas de museo, pero lo de este “Something Else By The Kinks” es que me abruma.

Una Obra Maestra del Pop, de la Música, de los sonidos, un disco que supera los límites de la realidad y que puso al grupo en el lugar que le correspondía, en el Olimpo de los dioses musicales y por ende entre esa élite irrepetible que perdurará hasta el fin de los tiempos, el grupo que hizo del Pop inglés algo único y universal.

El disco no tiene ni un “pero”, es perfecto, desde la estructura, lo que envía como mensaje y esas composiciones que son una joya tras otra. Una barbaridad transformada en Música que derrama clase por cada surco, el Pop en estado puro, pero por encima de todo superlativo, con una delicadeza que te sume en el sueño más placentero al escucharlo.

La mente de uno de los genios más increíbles de la Música contemporánea se desborda y su talento queda reflejado en cada instante sonoro que atraviesa los sentidos, con una continuación en el todo de la obra que no cesa, y que sólo sabe de elevar hasta lo más alto lo que te viene.

Espectacular, tremendo, una Joya eterna (y se marcaron muchas más…) de la Música en general y una guía excepcional de lo que es el Pop y lo que debería ser siempre que se busque la calidad tras lo que se crea.