domingo, 16 de diciembre de 2012

Tal


Surcos del Siglo XXI - 10

Maravillosamente indecente, esa es la Música que me apasiona porque somos unos indecentes los que nos atrevemos con sonidos que están fuera de todo lo establecido y no saben de listas, pausas, críticos ni fronteras, como esto...


Baby Woodrose (Blows Your Mind!) 2001


En el año 2001, de la iluminada mente de un tipo muy especial llamado Lorenzo Woodrose salió este proyecto al que llamó Baby Woodrose y que en principio iba a ser eso, un proyecto definido en un álbum y se acabó.
Este danés que está metido en miles de proyectos y es fijo de otros tantos, bandas que visitarán los "Surcos del Siglo XXI" porque tienen un espacio en la historia reciente de la Música, se decidió a realizar un disco en el cual él se encargara de todo lo habido y por haber, y de esa idea nació "Blows Your Mind!" un excepcional disco del Psycho más descarnado y ácido que tiene la particularidad de ser realizado desde la idea, la creación de los temas, la interpretación de los mismos y la producción por Lorenzo, es decir, una obra completamente ideada y realizada desde las entrañas hasta el momento de degustarlo cuando la aguja acaricia el vinilo (rojo en este caso, para que conste)
Una obra así merece un respeto, aunque sólo sea por la idea, el proyecto y lo que supone, pero si además resulta que es de una calidad brutal y una demostración de talento en estado puro no creo que haya que indicar nada que no sea disfrutarla y degustarla como se merece, porque rezuma clase por los cuatro costados.
Maravillosas guitarras asesinas que cortan el aire, ritmos entrecortados o enloquecidos según el caso, un bajo y una batería que van a ritmo constante llevándote en volandas, esa armónica que cuando quiere se cruza para romperte el sentido y por encima de todo, y esto es una opinión personal mía, la voz de Lorenzo Woodrose que es la guía en toda la obra. Se le puede poner mucho sentimiento, pero lo que él deja y cómo no creo que se pueda llevar más allá, porque da una lección de transmitir lo que ha querido hacer que tira para atrás.
Un disco muy especial, el comienzo de una aventura que siguió sin proponérselo pero que comenzó de una manera preciosa, con esas ideas que hay que poner para arriesgarse al todo o nada, y en este caso fue...
Música poderosa, brillante, araña las tripas, la sientes y notas cómo está ahí, una verdadera descarga de Rock Psycho del más alto nivel, porque la Música sigue sin saber de fronteras, eras ni espacios, y afortunadamente hay músicos que piensan de igual modo.
La portada, como la Música... sin fronteras. Escucha Baby Woodrose, no te defraudará.

Side A:  No way out;  Baby blows your mind;  What a burn;  Caught in a whirl;  Pandora;  Spinnins wheels of fire;  Living a dream;  Flaminica;  Maya
Side B:  D'ya get what ya give?;  Kara Lynn;  Right to get high;  Mind and soul;  Nobody spoil my fun




De Vinilos y Otras Glorias DCXXIII

Una pequeña rareza que fue por méritos propios historia de la Música en la cual decidieron desarrollarse, una pequeña historia dentro de la Historia.


Magma (Köhntarkösz) 1974


Entre la gente que entiende de esto, entre los cuales no me encuentro, los franceses Magma fueron la única formación no inglesa (discrepo en lo de única, por motivos obvios) capaz de mirar de tú a tú a los grandes grupos de las Islas en lo referente a creatividad e interpretación de esta Música apasionante llamada Progresivo.
Y que se me entienda bien, no discuto la calidad de Magma, todo lo contrario, es un grupo que me apasiona por su propuesta excepcionalmente original, atractiva y de calidad, pero creo que hay otros artistas no ingleses con esa capacidad para estar ahí arriba.
Dicho esto, Magma es un grande, una de las bandas más originales, innovadoras, inquietantes (por qué no decirlo) de todo el Prog. y de la Música moderna en general.
Creada por el enigmático Christian Vander, batería, voz, piano y percusión, gurú indiscutible de la banda y mente prolífica, mantiene influencias de autores contemporáneos y otros grandes del Prog. acertando en dar un toque personalísimo a la Música creada y recreada por él.
La Música de Magma es apasionante, y dentro de esa pasión este su cuarto álbum de estudio, el "Köhntarkösz" para el que suscribe el más apasionante de todos.
Un disco con una Música obsesiva, que te aplasta, angustiosa, a veces desagradable si no te metes en su propio universo, un mundo para el que está creada la lengua inventada por Vander llamada "kobaiano" que durante toda la discografía y este disco no es una excepción va narrando la llegada de una saga fantastica y científica a la Tierra desde el planeta Kobaia.
"Köhntarkösz" es un disco de una fascinación siniestra e inquietante, una Música sin los cánones propios de los sonidos, con voces que se repiten una y otra vez y que hacen referencia a momentos místicos.
Música libre y abierta, el disco se compone de cuatro temas, una larga suite dividida en dos partes en la cual se desarrollan todas las habilidades del grupo y se recrea la propia historia del disco,  oscura, obsesiva, lúgubre y siniestra, casi de ritual de misa negra, "Köhntarkösz Part One" con la cual comienzan la obra de 15'22'' y la apertura de la cara B "Köhntarkösz Part Two" de 15'55''.
"Ork Alarm" en la cara A y el homenaje al gran Coltraine en "Coltrane Sündïa" cierran esta obra maravillosa, enigmática... 
Los paridores de la idea, además de esa mente especial llamado Christian Vander son Jannick Top en el bajo, chelo, piano y voz; Klaus Blasquiz en la voz y percusión; Gerard Bikialo en los teclados; Michel Graillier en los teclados; Stella Vander en la voz; Brian Godding guitarra.

De Vinilos y Otras Glorias DCXXII

Vamos a seguir recorriendo los senderos de los más grandes en una Música apasionante hasta que nuestros sentidos se pierdan por... eso cada uno lo decide como quiere.


Greenslade (Greenslade) 1973


La histórica formación Colosseum, de la cual salieron músicos realmente apasionantes, tenía un líder indiscutible en la figura de Dave Greenslade, que en el año 71 abandona el barco para formar una banda con su propio nombre y en un sentido absolutamente distinto del anterior.
La guitarra desaparece y los teclados se convierten en el centro de toda la Música, especialmente en este primer disco que es un experimento en el más puro sentido Prog. con reminiscencias del Blues y jazzy.
La formación en cuarteto es toda una declaración de intenciones, con dos teclistas formidables, el propio Greenslade y Dave Lawson, de amplia experiencia en grandes grupos progresivos, un bajista excepcional que suple como idea a la guitarra y se convierte en un instrumento solista más gracias al virtuosismo de Tony Reeves y el grupo se completa con otro brutal músico que llevaba un bagaje excepcional en grupos de primera fila del mundo del Prog., el gran Andy McCulloch, un batería experto, técnico, maravilloso.
El disco es una perfecta mezcla entre temas para el desarrollo instrumental del grupo y otros más limitados en el tiempo, realmente los temas en los cuales el moog (en esa época en la cumbre de su popularidad) es utilizado con profusión crean ambientes que rayan en algunos momentos lo gótico, algo Dark, como en el tremendo tema "Sundance" y sus 8'45'' de deliciosa emoción con los teclados.
Las voces son una forma de melodía exquisita y parecen ajenas al resto de los instrumentos, como si flotaran en el aire escuchándolas en los momentos en los que deben acoplarse al resto.
Temas como "Drowning Man" o "Melange" se convierten en universos sonoros de una calidad compositiva realmente brillante y el uso de los teclados llenan esos ambientes como si estuvieras en una dimensión ajena a lo que se está escuchando. Ayuda y mucho la labor en la sección rítmica del bajo de Reeves que consigue algo que no es nada fácil, que la guitarra no se eche en falta en ningún momento.
La portada, un clásico gracias a la labor del icono del Prog., el gran Roger Dean que como siempre deja su impronta en una maravillosa recreación que es una pequeña obra de arte.
"Greenslade" es Música de muchos quilates; músicos excepcionales y composiciones bellas se dan cita para disfrutar de esos sonidos más allá de los propios creadores.

Side One:  Feathered Friends;  An english western;  Drowning man;  Temple song
Side Two:  Melange;  What are you don't to me;  Sundance 


sábado, 15 de diciembre de 2012

Ancient Misty Morning


Bette


Surcos del Siglo XXI - 9

Un artista que me apasiona en un grupo que me encanta, y a partir de ahí todo suele resultar más fácil, que es de lo que se trata.


Wilco (Summerteeth) 1998


Cuando un grupo o un artista (y en este caso casi que se refunden en uno aunque sea un grupo porque así lo han decidido) llega a la cima y a partir de aquí demuestra qué es, me gusta recordar lo que fueron esos comienzos que les hicieron caminar por los senderos de la Música, porque nada es el todo y nunca el todo deja de ser nada.
Wilco llevaba dos vinilos extraídos de esa manera de entender la Música como un Pop Rock fresco y delicado, con palabras intensas y canciones que llegaban sin dificultad, un segundo vinilo con una aceptación más que interesante y de pronto se encontraron en una encrucijada por los problemas personales de su carismático líder Jeff Tweedy.
No creo que a la gente le encante "Summerteeth" como la mejor obra de Wilco, no fue nada del otro mundo en ventas, más bien un fiasco, incluso ha sido machacado por cierto sector de la crítica (aunque hay que reconocer que a otra parte de la misma le encantó) pero a mí me apasiona. Creo que los problemas que hicieron que se tardara en grabar el doble disco más de un año sirvieron de catarsis para ser el primer trabajo de madurez del grupo, quizás por eso no se entendió o quizás por eso sólo me entiendo yo cuando mis pasiones afloran.
No cambiaron de estilo, el disco sigue siendo un tratado de Rock del que se puede llevar y escuchar en cualquier momento, pero si hoy Wilco es una celebridad como grupo no varía mucho de lo que hicieron en este "Summerteeth" cuya calidad sobrepasó lo hecho y algunas cosas posteriores.
La quejumbrosa voz de Tweedy en conflicto consigo mismo nos relata historias maravillosas sacadas de autores clásicos del siglo XX, como un juglar que nos adentra en los caminos de su propia vida. Los temas, escritos por el propio Tweedy y Jay Bennett salen de la sencillez y sin perder calidad se nota un profundo y más complejo modo de componer, la realización es mucho mejor y el grupo toca como no lo había hecho, lo que engrandece cada tema a la hora de llegar.
En formación de cuarteto, Jeff Tweedy se encarga de las guitarras acústicas y eléctricas, armónica y voz solista. Jay Bennett asume los teclados, guitarra, percusión y los coros. John Stirratt en el bajo y Ken Coomer en la batería.
Temas que son una demostración de la Música del grupo, de hecho creo que aquí se ve claramente lo que más tarde ha sido el mismo, una manera personal de introducirnos en ese Rock que nos lleva y hace soñar, porque Wilco es un grupo que eso lo consigue sin esfuerzo aparente.
"Summerteeth" es un disco precioso, un doble que se puede llevar dónde y como se quiera, lo que fue el final de muchas cosas y el principio de otras tantas que hoy nos hacen disfrutar, y esas puertas que se abrieron hay que saborearlas.

Side One:  Can't stand It;  She's a jar;  A shot in the arm;  We're just friends
Side Two:  I'm always in love;  Nothingsevergonnastandinmyway; Pieholden suite;  How to fight loneliness
Side Three:  Via Chicago;  ELT;  My darling;  When you wake up feeling old
Side Four:  Summer teeth;  In a future age;  Candyfloss;  A short in the arm (reprise)


Surcos del Siglo XXI - 8

Seguimos a lo nuestro por si nos pilla el toro (no suelo lidiar en ruedos pero la frasecita queda la mar de mona) entregando lo que nos es dado, de modo que...


Alfa 9 (Then We Begin) 2005


Psycho y Rock se dan cita en este precioso álbum de los británicos Alfa 9, una propuesta no por sabida desechada, porque cuando la Música se hace con la sensiblidad y el talento que estos cinco chicos demuestran es una gozada en cualquier lugar y situación.
Melodías que envuelven con arpegios de guitarras maravillosos, casi como una seda que acaricia, teclados que acompañan creando ambientes sugerentes y emocionales para que todo sea un conjunto armonioso, y cuando las descargas nos llegan a los sentidos devienen en trallazos que son pura dinamita perfectamente controlada por quienes las envían.
En formación de quinteto, los coros y voces solistas son de una frescura y una preciosidad que no se pueden obviar, apenas hay un sólo cantante en las estrofas, continuos juegos de voces y distintos tonos o acompañamientos corales excepcionales. 
Las guitarras llevan la batuta de las composiciones, pero lo mejor de este "Then We Begin" es que suena como un todo, incluso cuando los punteos rompen el aire enseguida son engullidos por esas voces, esos ritmos, esa base que forma la cúpula bajo la cual se crea el sonido del grupo.
Prácticamente todas las canciones se desarrollan con una continuidad absoluta, o no hay espacios vacíos entre ellas o los que hay son tan mínimos que apenas se aprecian, dando con esto una sensación de obra conceptual absoluta, cambios de melodías dulces y ensoñadoras con ritmos trepidantes, para que no pierdas ni un segundo de concentración.
Phil Mason, guitarra y voz; Ali Heath, bajo y voz;  Leon Jones, guitarra; Andy Shaw, batería; Jamie Gordon, teclados y voz.
Doce temas de puro Psycho con esos toque rockeros tan british, Música para soñar y llevar el ritmo en la sangre, una base rítmica que es un muro para sobrellevar el peso de las cuerdas y esos ambientes creados como fondo en temas, muchos de ellos de apenas dos minutos que son perfectos enlaces con toda la obra y el resto de los temas de mayor duración.
"Then We Begin" es un disco precioso, un momento íntimo para quienes amamos los sonidos delicados y que te llegan desde la piel hasta las entrañas, en lo demás, ¡¡eres tú y lo que te sugiera!!

1:  Prelude;  Then We Begin;  Interlude 1;  Flasher;  Interlude 2;  For your bones
2:  Give me your heart again;  Catch me If you can;  Interlude 3;  Deadman;  Birds & Flies;  Reprise


Surcos del Siglo XXI - 7

Una explosión en pleno rostro, la maravillosa sensación de saber que algo grande pasa cuando la aguja acaricia esos surcos que suenan a gloria, y que no pare jamás.


Colour Haze (Los Sounds De Krauts) 2002


Comenzar diciendo que para los puristas de la lengua el título del vinilo está correcto, otra cosa es lo que estos tres chicos hayan querido hacer.
En cuanto al contenido de esta maravillosa sensación que es un golpe a los sentidos, el doble disco con el cual nos regalan los teutones de Colour Haze es simplemente descomunal.
Rock, Rock y más Rock setentero en pleno siglo XXI de la mano de tres tipos que creen en una Música que fue lo que dio tantas cosas y que nos devuelven a aquellos maravillosos años aprovechando todo lo que el siglo actual pone en sus manos, una delicada y cuidada producción, un sonido tremendo y genial y por supuesto el talento de ahora para hacer las cosas de antaño.
Una obra magna, compacta, en formato de Power Trío que no sabe de coger prisioneros, impactos directos a los sentidos y descargas brutales de buen Rock Duro para saciar al más exigente.
Eternas Jams que nos recuerdan esas monumentales exhibiciones instrumentales, aquí llevadas de la mano de tres tipos lanzados al vacío para desarrollar los temas sin pudor, comenzando con esa guitarra que echa fuego cuando arranca las cuerdas, distorsiones y riff tremendos de la mano de Stefan Koglek, un guitarrista monumental, salvaje y fiero en sus punteos. De vez en cuando también canta, y digo esto porque cuando lo hace se come lo que sea, por eso no debe prodigarse más a menudo, para no liarla. La producción del disco corre a cargo de él mismo, por algo será.
La batería y percusiones son maltratadas (en el buen sentido, por supuesto) por Manfred Merwald, un tremendo pegador que sigue esos ritmos endiablados y se va descolgando con tremendos repliques y solos dentro de cada tema.
El bajo, que es otro solista y que te rebota en las tripas con cada nota es tocado por Philipp Rasthofer, cerrando el círculo de poder con el que nos deleitan.
Once canciones para noventa minutos de delicia Hard con ribetes Psycho, en ocasiones algo oscuro y mucha clase, temas que se alargan en el infinito, largas jams homenaje al placer de tocar y cuando se hace bien ¡¡para morirse!!
Cuatro caras inmensas con los nombres de los puntos cardinales que comienzan con "I Won't Stop", dejando claras las intenciones del grupo. La orgía con la que disfrutas en "Weltraummantra" y sus 18'00'' es para alucinar, como ese legado titulado ""Overriding" 17'37'' para morirse. También hay espacio para piezas cortas que nos acarician por su sensibilidad.
Colour Haze es un grupo que hace maravillosas descargas de Rock, y este "Los Sounds De Krauts" un momento en su carrera donde consiguieron hacerse mayores, y se nota ¡¡vaya si se nota!!

Westen:  I won't stop;  Roses;  Zen
Süden:  Plazmakeks;  2+7;  Sundazed
Osten:  Where the skies end;  Weltraummantra
Norden:  Other side;  Overriding;  Schlaflied


Piccola Stella Senza Cielo


No Sé Reflexionar


No somos como nos ven, sino como sentimos. La percepción es así, por eso algunos van pasando con la imagen que tienen los que realmente no quieren verlos, y son felices, y viven y van y vienen y... por eso otros no estamos, ni tan siquiera queremos estar ¡¡vive el cielo!!
Nos sentimos y es lo que vale, o al menos lo que me vale, no sólo lo que siento en este pedazo de mundo que me ha tocado, sino lo que me siento por estar, ser, vivir, soñar, pensar, hacer eso que realmente consigue que mi mente se despierte cada día para ir a buscar mis sueños.

No puedo decir que soy lo que quiero ni quiero lo que no tengo. Realmente soy como estoy y me siento como me veo, aunque cambiaría esa angustia por la perfección que me persigue desde que creo en el sueño hecho sonidos. 
La imperfección me parece más bella, más abrumadora, más íntegra, saber vivir con ella es darle sentido a caminar hacia adelante, buscar un paso más y ese peldaño aunque nunca se suba, la imperfección es sentirse perfecto por saberse imperfecto, y si uno sabe quién es, lo que es y hasta donde llega, realmente no tiene límites.

Yo no reflexiono, realmente esto puede ser una entrada en un Blog de un amigo o palabras que me salen y caen por aquí o por allá, hoy le ha tocado a Agilulfo y otras veces él me toca a mí. No reflexiono, ni pienso en voz alta, sólo quiero sentir y que no me vean, por eso estoy a años luz de quien realmente han dibujado, ¡¡así me va!! pero me va como debe sabiendo que me las dan cuadradas.
Me dijo Agilulfo, "escribe algo, yo estoy seco, me vacío con la Música, di algo, lo que se te ocurra..." pero si me quitan la Música a mí también me voy secando poco a poco, es lo que tiene, eso sí es sentimiento. Por eso soy cuando la escucho, por eso sé que puedo llegar o hacer si está conmigo, por eso la delicadeza de Steven Wilson me susurra ahora y me deja hacer... aunque de pronto atrone mis entrañas y me patee las tripas, pero es así, si la tengo soy y si soy todo se ve de otra manera.

Dicen que estoy loco porque la Música me ha absorbido el seso. No sé, no lo veo desde fuera, lo que sí entiendo es que no les llegue, no me comprendan si estoy ensimismado con ella, porque en ese instante el mundo desaparece, me lleva y se transforma en un agujero negro donde sólo estamos los sonidos y mi alma. Será una locura, no lo discuto, pero ese espacio sí es mío realmente, no el vinilo que compro o la habitación donde la escucho, sino ese espacio de mi mente, mi alma y mi interior donde se aposenta y se queda para que yo la sienta.

Como ya he dicho, no sé reflexionar, los impulsos van y vienen y los hago míos, por eso estas palabras, estas líneas, esto... me decidí porque Agilulfo me aseguró que no le leía ni cristo, tres locas, dos suicidas emocionales y él mismo. Yo soy uno de los suicidas emocionales, por si no queda claro, de modo que así todo queda en familia, más de "ya está otra vez este con sus cosas" y siguen sonando las notas, esos espacios que me arañan la piel.
¡¡¡Belleza, Ternura, Sentimiento!!!

Sed felices, si podéis escuchad algo de lo que dice el loco este (Agilulfo, no yo) que siempre merece la pena, es un apasionado y se le nota, y con las pasiones yo no me meto, pero por si queréis saber un secreto, esa pasión ha hecho que seamos dos almas gemelas y es lo mejor que me ha pasado en mi vida.


Thundercrack


De Vinilo y Otras Glorias DCXXI

Tan excepcional como innovador, tan exquisito como minoritario, así era el grupo que a continuación nos acompaña, pura fantasía.


Henry Cow (In Praise Of Learning) 1975


En el sonido de Canterbury, como ya hemos dicho sede de lo mejorcito y más florido del Prog. melodioso y sinfónico, había cabida para excepcionales y díscolos músicos que situados en la extrema izquierda tanto en su concepción musical como social y política formaron una de las bandas más revolucionarias e innovadoras del Rock.
A pesar de este carácter extremo en sus ideas, la afinidad con Canterbury queda patente sobre todo en las partes vocales y algunos espacios interpretativos instrumentales, pero como hemos dicho, esa forma extrema es lo que confiere la personalidad del grupo y hace de su sonido algo muy especial.
La obra que traemos, "In Praise Of Learning" es el cuarto trabajo del grupo, y surge de la fusión de los componentes que habían abandonado la nave previamente y los que se habían incorporado junto a los que quedaron, naciendo de esta mezcla de talento un disco tremendo, bellísimo y como siempre en el caso del grupo muy original.
La Música se convierte de nuevo en esa sensación extrema que te abruma, te apabulla y te envuelve, pero gracias a la voz melodiosa y genial de Dagmar Krause y la guitarra y voz más dulcificada de Peter Blegvad hay más parte vocal, aunque no sean canciones propiamente dichas.
Es tal el impacto en la manera de entender la Música que el sector más radical de crítica y público consideran este disco como la única obra Progresiva en estado puro del grupo (discrepo de ello porque su obra maestra "Legend" es parte de esa historia Prog.) y aunque sea la más cercana al concepto, no es lo único que hicieron se esta factura.
Música difícil, compleja, radical y militante, anticapitalista y de izquierdas, como el tema "Living In The Heart Of The Beast", un alegato contra el sistema que en muchos lugares darían con sus huesos en la cárcel. 
El grupo, en este disco y tras la unión comentada, quedaba de esta manera:
Tim Hogdgkinson, teclados. Fred Frith, guitarra, violín, xilófono, piano. John Greaves, bajo y piano. Chris Cutler, batería y radio. Dagmar Krause, voz. Peter Blegvad, guitarra y voz. Anthony Moore, piano y efectos. Lindsay Cooper, bajo y oboe.
Para los que amamos una Música más allá de los propios sonidos, de las melodías, Henry Cow es un soplo de aire fresco por su valentía, su propuesta y la manera de hacerla llegar, sin tapujos y sin restricciones, una Música para pensar, deslizarse por los sentidos y sentirla en lo más profundo cuando te hace suya, realmente una maravilla.

ART IS NOT A MIRROR - IT IS A HAMMER

Side I:  War;  Living In The Heart Of The Beast
Side II:  The long march;  Beautiful as the moon, terrible as an army with banners;  Morning star



De Vinilos y Otras Glorias DCXX

Otro mito de la Música Progresiva así con mayúsculas, para que no perdamos el hilo al menos durante este pequeño impas dedicado sin haberlo propuesto.


Family (Music In A Doll's House) 1968


La entrada de Family en el mundo de la Música fue tan espectacular como maravillosa. Un grupo clave para el conocimiento de la Música inglesa a caballo entre dos décadas, el paso fundamental y cómo darlo entre la psicodelia y el Progresivo.
Con esta maravilla llamada "Music In A Doll's House" se convierten de manera arrebatadora en uno de los grupos más imprevisibles de toda la escena inglesa y por ende mundial, un disco con un contenido expresivo inmenso con momentos de innovación excepcionales y eclécticos.
Debido a ese puente entre eras que a ellos les cogió en el camino, se denotan influencias de Folk ácido que ya va desvariando hacia el Prog. sin perder los orígenes de Blues negro que se aprecian sin duda en el disco.
La portentosa y particular voz de Roger Chapman nos acompaña de manera melodiosa y violenta, según que caso, para no dar un sólo respiro a lo que nos llega. Encargado también de la armónica y el saxo.
John Whitley da una lección a las seis cuerdas, contrapunto y momentos de inspiración muy elevados.
Jim King en las armónicas y saxos, brutal, asonante en extremo, delicado... toda una lección de ritmos y continuos laberintos sonoros.
Ric Grech en el bajo, violín, chelo y voces, un portento de instrumentista, un lujo para los oídos.
Rob Townsed en la batería.
Un grupo mítico, una formación legendaria unidos para regalarnos un trabajo excepcionalmente bello, atípico y original en extremo. Sus canciones van paseándose por diversos estilos que desarrollan sin ningún problema, desde el Prog. sinfónico de "Mellowing Grey", pasando por un poliformismo instrumental "Winter" o su visión psicodélica del mundo "Old Songs New Songs".
Un disco que abre una era de excepcional nivel en un grupo siempre original, temas cuidados con composiciones instrumentales exquisitas, una forma de hacer y entender la Música realmente bella dentro de los sonidos que requieren esa dosis de asunción por parte de quien lo escucha.
Family, un mito en su presentación para ser leyenda. A partir de aquí...

FRONT:  The chase;  Mellowing grey;  Never like this;  Me my friend;  Variation on a theme of Hey Mr. Policeman;  Winter;  Old songs new songs;  Variation on a theme of The breeze
BACK:  Hey Mr. Policeman;  See through windows;  Variation on a theme of  Me my friend;  Peace of mind;  Voyage;  The Breeze;  3xTime


De Vinilos y Otras Glorias DCXIX

Estamos en vísperas de eso que se llama felicidad, y como para nosotros se traduce en Música, un pedazo en otra entrega de esos sonidos que nos dan la felicidad siempre que los escuchamos.


Caravan (If I Could Do It All Over Again, I'd Do It All Over You) 1970


Tras este título inmenso, difícil de retener y poco típico en nombres de vinilos, que además tiene un origen de doble sentido bastante malicioso, se esconde una de las primeras piezas que se pueden considerar un manual del Rock de Canterbury, esa maravillosa y singular "escuela" que aglutinó a algunos de los principales grupos y músicos del glorioso Prog., de lo más florido y excelso de la era.
Caravan ha sido siempre un grupo señero de esta corriente, y sus primeros trabajos maravillosas y visionarias muestras de delicadezas hecha Música, y con este "If I Could Do It All Over Again, I'd Do It All Over You" se muestran como uno de los estandartes antes de su maravilla compositiva, el inigualable "In The Land Of Grey And Pink".
El disco condensa todo el saber y la idea del grupo en tres largas suites, "And I Wish I Were Stoned", "With An Ear To The Ground" y la maravillosa "For Richard" (esos 14 minutos en la cual se funde toda la magia que Caravan sabía transmitir) y durante todo el trabajo las letras mezcladas con la Música nos dan una idea del conjunto entre Rock y cuentos narrados, con mensajes claros en clave de Pop con algo de Folk y Rock sinfónico.
El grupo con sus miembros míticos, encargados de darnos esos sonidos dulces y melodiosos tan característicos, y que en esta época eran Richard Coughlan en cargado de la batería y todo tipo de percusión; Richard Sinclair al bajo y la percusión; Pye Hastings en las guitarra acústicas y eléctricas; David Sinclair en los teclados. En los créditos figura Jimmy Hastings como saxo y flauta y a fe que por el trabajo que realiza en el disco se le puede considerar el quinto miembro del mismo.
Atmósferas fantásticas que nos llevan a mundos lejanos donde la fantasía es la dueña absoluta de lo que te llega, arreglos orquestales para ayudar a esta idea, y sobre todo y pieza importante no sólo del álbum sino de la propia historia Prog. el equilibrio entre la parte cantada y la instrumental, que por fin ayuda en cada espacio que nos regala.
Un disco tremendo, maravilloso, para disfrutar del Prog. más refinado, con esos aires melódicos que ¡¡cuidado!! nos adentran en laberintos instrumentales simplemente mágicos porque el grupo es un portento de calidad interpretativa.
Una obra que te envuelve en esos viajes hacia tu imaginación y recrea todo lo que uno pueda soñar.

SIDE ONE:  f I Could Do It All Over Again, I'd Do It All Over You;  And I wish I were stoned  / Don't worry;  As I Feel I Die / With An Ear To The Ground You Can Make It / Martinian / Only Cox / Reprise
SIDE TWO:  Hello hello;  Asforteri;  Can't be long now / Francoise / For Richard / Warlock;  Limits


domingo, 9 de diciembre de 2012

De Vinilos y Otras Glorias DCXVIII

Seguimos con esta saga de excepcionales momentos del Prog. que por alguna razón pasaron demasiado levemente por nuestro paseo, y así nos vamos quedando a gusto.


Hawkwind (Doremi Fasol Latido) 1972


Tercer álbum de los todopoderosos Hawkwind, mítico grupo que aún se mantiene creando sueños, y segunda obra maestra de la banda tras ese "In Search Of Space" que marcó a fuego la trayectoria de los mismos.
"Doremi Fasol Latido" tiene el honor de haber dividido a los seguidores sobre si es el auténtico monumento musical de los Hawkwind o su antecesor. Para mí es una joya del mismo calibre, y si bien puede gustar uno u otro por pequeños detalles que no van más allá del gusto personal (algo que por otra parte es respetable y básico para cualquier amante de una forma de expresión como la Música) porque este disco que aquí traemos es una barbaridad del Prog. espacial del mayor nivel, una obra magna y excepcional se mire por donde se mire.
La entrada en la banda de Lemmy y Robert Calvert provocan un cambio de dirección en la Música del grupo que la hace más compacta y segura, una manera de expresar estos viajes infinitos que nos regalan con una poderosa base compositiva y además la voz sugerente de la guía por toda la grabación.
El disco se hace con una grabación casi en directo, una manera "bootleg" de presentar los temas, impactante y novedosa, lo que queda demostrado en los grandes temas del álbum, maravillosas composiciones que no dejan lugar a dudas sobre la Música del grupo. Sin pausa, sin nada que no sea la continuidad como un concepto de Música desde la primera nota hasta el final.
"Brainstorm" es la anarquía musical expresada en 11'33'' de pura energía; un auténtico lujo ese Hard Folk de "Space Is Deep" y sus 6'22'' de pura magia que se unen al suspiro "One Change".
El oscuro lamento Dark en formato de puro Hard que es "Lord Of Light" o el canto tribal que nos lleva a los confines del universo llamado "Time We Left This World Today" o la apocalíptica "The Watcher". Esa belleza llamada "Down Throught The Night" marca a fuego de Hawkwind.
Un álbum que es puro sonido Hawkwind, una tremenda demostración de su Música y su clase, la impronta de una banda única en muchos aspectos y muy especial, eso sí, para el que se atreva a adentrarse en su universo, único, maravilloso, visceral y anacrónico.
En esta joya del Prog. espacial nos encontramos con una formación mítica, a saber:
Dave Brock, guitarras, voz. Nick Turner, saxo, flauta y voz. Lemmy, bajo y acústica.
Dik Mik, sintetizadores. Del Dettmar, sintetizadores. Simon King, batería. Robert Calvert, voz
Viaja, sueña, vuela y déjate seducir por la magia en forma de Música de Hawkwind para no volver jamás.





De Vinilos y Otras Glorias DCXVII

Otro grande, que fue lo que quiso cuando lo deseó y no fue más allá porque no le dio la gana, y eso es tenerlo muy claro y pasarse por el forro lo que a uno le rodea (¡quien pudiera!)


Kevin Ayers (Shooting At The Moon) 1970


Se podrá decir lo que se quiera de Kevin Ayers, pero que en su época de esplendor y creatividad suprema actuaba en lo musical como un genio creo que no puede negarlo nadie. Otra cosa es que esa genialidad duró lo que duró, media década gloriosa y algún puñado más de ramalazos a las entrañas, pero eso ya es cosa de cada uno.
Tras una obra maestra de proporciones maravillosas, en esta segunda entrega en solitario se marca una joya de Prog. tan excepcional como atípico, una Música que raya el Pop-Rock con esos toques que este hombre hacía tan bien y le lleva por los senderos de esa brutal exhibición Prog.
Una banda de amigos y conocidos que junto a Ayers crean un universo de sonidos mágicos, que abducen por su belleza y manera de envolver al que lo escucha.
Es casi una obra conceptual, en la cual se unen composiciones estilistas y que poseen una definida estructura con otras de una anarquía absoluta y mágica que te hacen ir por senderos de emociones contenidas, nunca sabes por dónde puede salir la siguiente pieza, el momento del cambio constante, la armonía que se dispersa o se une sin pausa. Cuatro temas, dos por cara que a su vez se dividen en espacios donde todo es posible.
No hay lugar para nada que no sea la creatividad, canciones de humor negro se mezclan con críticas feroces y declaración de intenciones del autor, parodias de estilos al uso o en desuso.
Una cosa es la creatividad compositiva, que en el disco se percibe sobradísima por talento e imaginación y otra es poder plasmarla para que todo parezca lo que es, y en eso Ayers se rodea de unos músicos maravillosos, todos de la escuela Prog. que entienden perfectamente lo que se quiere y lo hacen real.
David Bedford en los teclados, acordeón y guitarra. Lol Coxhill en el saxo. Mike Oldfield en el bajo, guitarra y voces. Mick Fincher en la batería y percusión. Kevin Ayers se encarga de las guitarras y la voz.
Ayers nos guía en este "Shooting At The Moon" a través de sus propios sueños y nos envuelve con su voz primero para hacernos partícipes de historias que con la Música nos va induciendo, una manera personalísima y especial de crear donde la mente y los deseos deben estar a flor de piel, un viaje por las entrañas de la mente del que escucha que se transforma en lo que uno quiere, un prodigio de Música para soñar y hacer... pues eso.
Cuando la Música es arte y el Prog. se expresa en sus más altas formas de clarividencia, surgen joyas como esta, que no por manido debe dejar de decirse, porque es arte en forma de notas.

SIDE ONE:  May I;  Lunatics lament
SIDE TWO:  The oyster and the flying fish;  Shooting at the moon


De Vinilos y Otras Glorias DCXVI

Vamos a dejarnos acariciar de nuevo por esos grandes de una Música mágica que por alguna razón sólo "Pasearon Por Nuestros Sueños" de puntillas, para que se vayan quedando con nosotros un poco más.


Gentle Giant (Acquiring The Taste) 1971


El maravilloso viaje que nos propone Gentle Giant desde esa manera tan particular y emocional de entender la Música a través del Prog. deviene en arte en esta su segunda obra que convierte al grupo con toda la razón que le da lo creado en mito y leyenda del Progresivo más underground.
A pesar de su talento y calidad, siempre fueron un grupo de culto para minorías y su popularidad no fue más allá del reconocimiento como uno de los grandes dentro de la propia corriente.
Una de las formaciones de mayor calado en cuanto a la calidad de su producción, en este "Acquiring The Taste" consiguen que todos los planetas estén alineados para entregarnos una obra de orfebrería apoyados por el talento compositivo de sus miembros y una excepcional calidad como músicos que unidos forman una exquisita manera de transmitir la Música.
Si con el primer trabajo dejaron la impronta de lo que podían dar de sí, en esta segunda entrega, que como ellos mismos explican en su álbum se trata de "... the second phase of sensory pleasure", el sonido deviene mucho más refinado, más limpio y cuidado, homogéneo. Por supuesto continúa la línea de esa delicada manera de componer las melodías perfectamente unida a un cierto componente Hard en su estructura que a su vez va de la mano con una cierta imagen gregoriana y neo romántica.
Los seis miembros originales de nuevo demostrando ese virtuosismo que al servicio de la Música hecha con sentimiento se convierte en un deleite que es pura seda.
Ray Shulman en el vioín y bajo. Gary Green guitarras y voces. Kerry Minnear piano y voz. 
Phil Shulman percusión y voz. Derek Shulman voz. Martin Smith batería.
Un disco maravilloso, una joya del Prog. de muchísimos quilates que se degusta con una facilidad asombrosa dada su calidad, a pesar de los intrincados laberintos de su Música.
El juego de guitarras en "Pantagruel's Nativity" es una maravilla emocional, o esas improvisaciones sin pausa que nos deja "Plain Truth". El melotrón toma más protagonismo en la obra, como la exhibición de "The Moon Is Down", y esos giros que flirtean con el Rock más auténtico en la bellísima "Wreck" son para morirse.
Un grupo de lujo con una obra de arte, cuarenta minutos de deleite musical para disfrutar de un viaje fascinante a través de un concepto único. ¡¡¡Disfrútalo!!!

Side One:  Pantagruel's nativity;  Edge of Twighlight;  The house, the street, the room;  Acquiring the taste
Side Two:  Wreck;  The moon Is down;  Black Cat;  Plain truth


sábado, 8 de diciembre de 2012

Retranca 3


Definitivamente el individuo, la individua, los individuos o las individuas (impresionante lo que hay que hacer para ser políticamente correcto ¡¡qué gilipollez!!) que quieren molestar con esto de las pegatinas que representan anuncios del más variado talante (eso sí, todos de un hortera subido de tono que alucinas) no deben conocerme mucho, o al menos no deben conocer los deseos más profundos de mis gustirrinines, porque de vez en cuando, o sea siempre, la cagan con esos anuncios que son pura dinamita.

El último que he visto decía aquello de llevar plana la panza y apostillaba cómo hacerlo, además de indicarte que con ello (más o menos, no lo recuerdo bien) las chicas, no tan chicas y las que nunca lo fueron te iban a mirar de otra manera.
Posiblemente tengan razón, me iban a mirar sorprendidas por no tener la barriguita cervecera que con tanto esfuerzo y euros he conseguido hacer y que es parte de mi idiosincrasia, de mi andar chulesco y desgarbado y que además me sirve para que de vez en cuando alguien me pregunte por mi embarazo y el mes en el que me encuentro.
No, no deben saber que al final me mirarían con asco por no tener esa almohadilla donde acomodar sus cabecitas en horas de descanso, y que yo me miraría con re-asco por haber tirado a la basura tantos años de esfuerzo y posturas estudiadas para apoyarme en la barra de los bares y no caerme tras esas jarras fresquitas y exquisitas.

Plano sí, pero de cerebro es como están los que sugieren al que suscribe tamaña insensatez, aunque de vez en cuando se superan con alguna perla que no tiene desperdicio.
Me sale a la derecha (estos son los nuevos y como van en vertical suelen salir cosas "a medida") un nuevo modelo de preservativo que tiene la cabeza de quita y pon para vaciar al llenar y llenar para después vaciar. ¡¡Rediéz!! que los conceptos se están mezclando. A ver, si relleno o lleno es para vaciar o llenar, y si lo hago, o sea, vacío y lleno, ¡¡de qué coño me sirve el preservativo!! porque si se descose el utensilio y en mitad de la faena se vacía y no debe se lía, pero si se mantiene, que es su función y luego se vacía cuando uno está vacío sin estar dentro de donde se vacía, me da a mí que es como hasta ahora había sido y entonces el utensilio de abre-cierra no tiene mucho sentido (ni poco, ¡qué leches!)
Lo mejor eran los colores, de fluorescente para arriba, y además con un dispositivo que avisa del vaciado o llenado según el caso, algo sorprendente y otro plano de cerebro con un amigo empresario.

Ahora, mientras escribo, en la parte baja de la pantalla me sale una especie de sonrisa profidén que es parte de la boca de una linda señorita que me dice en un perfecto italiano aquello de que lo mejor está por llegar, y me anima a llegar a los sesenta. Pues como no se den prisa para proponer lo que sea a los sesenta puedo estar para muchas cosas, pero para lo de la sonrisa tras el momento en el cual se te pone de aquella manera (la sonrisa, quiero decir) no sé yo, que mi barriguita cervecera requiere mucha cebada y poco ánimo para lo demás.
¡Ojo! había truco; tras la sonrisa se despliega una puerta y sale la cara de un burro descojonado de risa que va y viene sin parar y ahora lo que está por llegar es una casa para apostar sobre ocurrencias varias, e incluso tú das tu variada ocurrencia y el personal apuesta a eso. 
¡Mamma Mia! si supieran las ocurrencias que puedo tener sería algo para apostar, eso seguro.

No está mal. el mundo gira, la vida se desmorona, esto es una mierda de proporciones inverosímiles y además de todo esto en el Blog la gente me va haciendo un poco menos monótono entrar y ver lo de siempre, porque entre los dos de arriba, el de abajo, el de la derecha en vertical (ahora hay un plátano) y el que va y vine más abajo aún, las letras se difuminan y casi que me invento el siguiente párrafo.
Casi nada para mantener la compostura y pensar que los mediocres y castrados mentales se aburren porque más allá de eso, la mediocridad que les lleva, no tienen nada más (bueno, estos modelitos de pseudo anuncios que no valen una mierda)

Let's Work Together


Surcos del Siglo XXI - 6

Hala, vamos allá, o al menos no nos vamos para acá, que decía un amigo mío y después no íbamos a ningún lado, como suele ocurrir. De modo que...


Buffalo Tom (Smitten) 1998


Siempre me ha gustado Buffalo Tom, de hecho en la década de los noventa me parecieron de los pocos soplos de aire fresco que se podían aprovechar cuando la Música andaba por ahí, y además ese carácter aventurero y libre dentro de un mundo encorsetado es de agradecer, ¡¡vaya que sí!!
No he cambiado mi forma de pensar, pero cuando el "Smitten" llegó a mis manos allá por el año 1998 me impactó su radical cambio dentro de la misma propuesta.
No sé si fue el momento ideal porque la banda andaba muy convulsa y su líder Bill Janovitz no las tenía todas consigo, pero el caso es que de la rabia, la desesperación o el talento les salió el que para mí es el mejor disco de su carrera, y no porque el desarraigo de otras obras me parezcan a desmerecer, sino porque ese salvajismo que caracteriza a sus composiciones aquí se encuentra más comedido y la furia sale en una dirección absolutamente magistral, con temas de una delicadeza extrema y baladas, o según se mire siendo ellos pseudo baladas que arrancan la piel a tiras.
Bill Janovitz canta como nunca, con un sentimiento ajeno a la desesperación, como queriendo decirte lo que realmente le quema las tripas, y las distorsiones de su guitarra te arañan igual que te abruman por una caricia absolutamente demoledora, simplemente una delicia.
El bajo de Chris Colbourn y la batería de Tom Maginnis siguen poderosas y no se pierde ese carácter de Power Trío que es su seña de identidad, pero se nota una dulzura en según qué momentos que te llevan a saber que esta obra es diferente, tiene algo de madurez y saber estar al margen del resto de su producción.
Por lo demás, y al margen de ser un disco excepcional dado que los temas son tremendos y la manera de interpretarlos muy especial, es un disco de Buffalo Tom desde la primera nota, un vinilo que rezuma ese carácter indie o alternativo (¡¡joder con los nombrecitos!!) de todo lo que hacen, intentando estar al margen de lo establecido y creando su propio espacio, y eso siendo americanos y encima de Boston no es nada fácil.
Composiciones que no escatiman esfuerzo, guitarras asesinas y arpegios suaves y delicados se dan cita por igual, algún desliz de cuerdas y violines bellísimos que ayudan en los temas más melódicos, la voz de Janovitz enamora y esa sección que te patea las tripas y que me encanta que así sea.
Un disco de Buffalo Tom, un disco de Rock sin aditivos, una pedazo de obra que es un grito a lo ben hecho, la Música que nos apasiona desde las entrañas de lo más profundo de los sentimientos, y os aseguro que algunos temas me han puesto la carne de gallina y siguen haciéndolo (porque cuando escucho cosas como "Scottish Windows", "Postcard", "Wiser"... me estremezco)
Sin que tenga mucho que ver, la portada una preciosidad, y la textura de auténtico lujo.
¡¡Qué más queremos!! es lo que nos lleva, la Música, la esencia y lo que nos da, ¡¡Aprovéchate por tenerla!!

Side One:  Rachael;  Pastcard;  Knot In It;  The Bible;  Scottish Windows;  White paint morning
Side Two:  Wiser;  See to me;  Register side;  Do you in;  Under Milkwood;  Walking wounded