IRON
BUTTERFLY (IN-A-GADDA-DA-VIDA) 1968
Cuando nombro en tantas ocasiones la palabra Psycho, y a veces quiero demostrar en lo musical qué podría significar, casi siempre pienso en este disco.
El paradigma de la
Psycho más excesiva, especialmente (¡¡¡cómo no!!!) el tema que es el centro del
disco y de casi todo lo que aglutina por sonidos, pero que en sí mismo como
obra completa demuestra lo que son esos sonidos cuando se trasladan a la
interpretación.
Un disco perfecto, un
sonido único en lo grabado, con una Psycho pesada, excesiva, ajena a todo lo
que no sea retorcerse en la piel, una imagen que salta el vinilo para hacerte
escuchar en mil colores e imágenes llenas de arrebatos alucinógenos los temas
de los que está compuesto.
Creo que es uno de los
grandes discos de la Historia porque nunca se ha hecho este estilo tan rayado
en la mente con el exceso que “In-A-Gadda-Da-Vida” lo traslada, y es cierto que
parece el manual perfecto para saber qué es el estilo y lo que representa.
Por descontado que la
suite homónima es dentro del cuadro el espacio donde la paleta se ha encargado
de dar intensidad a toda la idea, pero es que el todo como conjunto es de una
efervescencia impresionante.
No sé qué llevaban
metidos los miembros del grupo (especialmente Doug Ingle) para ser capaces de
crear esta enormidad y sobre todo para darle forma como notas en un pentagrama,
pero la realidad es que plasman una forma de “ver” la vida de manera
excepcional, creando una obra imperecedera en su conjunto, incluida la portada
con esos toques que no se pueden describir, sólo ver y disfrutar.
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