miércoles, 8 de junio de 2011

Higiene Mental, Ensayo De Una Utopía


Vamos a comenzar en este “Paseando por los sueños” un corto espacio (más que nada porque no sé si la protagonista querrá que dure o no) transcribiendo algunas de las cartas que llegan al consultorio radiofónico de Madame Tramontana (el nombre artístico no está muy logrado pero a ella le sirve, por lo de la frescura del viento) como respuestas a deseos de contactar con otros seres de algunos desesperados emocionales o caraduras sin emociones. El espacio, o la sección de los “sueños” se llamará como reza el encabezamiento, y a ver si sale. Insisto, no sé lo que durará, aunque agradezco que nos deje estos ramalazos de lo que es, previo consentimiento, como no podía ser de otra forma, de los protagonistas.

Yo no puedo enamorarme de ti, o al menos no como tú deseas, será porque me pilla mayor, a desmano o en algún lugar alejado de todo, pero no puedo, de verdad que no. Además ya me voy conociendo, me ha costado, no creas, pero me voy conociendo, y no es por achacárselo a estos desmadres hormonales que tengo ahora, ni al hecho de ser una mujer moderna que no necesita al hombre de turno, o al hombre, sin turno ni número, no es eso, yo estoy más cerca de ser “Vintage” que “New Age”, pero es que lo de enamorarme de ti me da mucha pereza, es un esfuerzo para el que no estoy preparada, y eso que te agradezco sinceramente que tú lo estés de mi persona, mi body y mis locuras trascendentales de pre menopáusica sin remedio, porque lo tuyo es tener fe en el ser humano, ¡sí señor! pero con el enamoramiento sin límites que me tengo ya voy sobrada, me doy cada atracón que no veas.
Me sorprendió gratamente que me lo dijeras, incluso que hicieras el esfuerzo para que pudiera algún día, llegado el caso, ser tú el elegido para estar enamorada de alguien, pero aparte de lo anteriormente expuesto (ves que fina me pongo a veces cuando escribo, y luego dicen que no) últimamente me van las cosas de mi condición, eso tan manido “de igual a igual” pero de verdad, o sea, igual, igual, sea hablando del tiempo, de los escarabajos en época de celo, sintiendo los calores de vientre para arriba, los de vientre para abajo o estando en pelota picada y viendo que lo de igual es una verdad como un templo, así es que para empezar ya lo tenías difícil, a menos que tiraras de cuenta corriente y cortaras por lo sano (literal) con una operación tan costosa como poco favorecida para tu ego, y te entiendo, oye, de verdad que sí, no hagas que el bisturí entre en juego por mí, ¡válgame Dios que ninguna lo valemos! te lo dice una mujer que sabe de mujeres.
¡Qué se le va a hacer! con lo que yo he sido y me he corrido con los hombres (hablo de juergas, amoríos y amistades varias, que el verbo correr tiene esas cosas) pero ahora os veo más en plan maternal, como de daros el pecho y luego a la cama (a dormir, a dormir, que hoy estoy que lo mezclo todo) así es que imagínate lo de enamorarme, imposible, lo mires por donde lo mires.
Así es que chico, ya ves, esto es lo que hay, como decía aquél melenas que te caía bien dentro de su familia pero mal en el conjunto de la historia musical de este país (te das cuenta que sigo con la finura, ¡qué manera de expresarme, estoy sembrada!) bueno a lo que iba con lo que decía el melenas, “Yo no puedo enamorarme de ti” no eres tú, de verdad, no me hagas el tonto y te pilles una depresión de las tuyas, coge la Música, una de esas cervezas de importación que tanto te gustan y llama a alguien para haceros unas risas, ya verás como en unos días estamos los dos riéndonos a nuestra vez de este episodio extrañamente sensiblero entre nosotros, y lo mismo me apunto y la de la cerveza de importación, el canuto y las guasas soy yo, que ya me conoces.
En este punto lo dejamos, que me estoy empezando a liar y no estoy para muchas fiestas, que ahora se llevará lo de ser “Vintage”, pero cuando te suben los calores, o te enfrías en seco o de seco nada, así es que me despido con esa sonrisa tan mía que sé que te gusta, el gracejo que me enseñaste con tu humor negro y que he perfeccionado como buena mujer, y el deseo (de verdad, chiquillo, de verdad) de que se te quite cuanto antes de la cabeza esta idea tan romántica y bonita (porque eso no te lo niega nadie) pero que me coge como te he dicho, muy de gafas “Ray Ban” sesenteras, ¡¡¡y yo tengo una marcha…!!!
Besitos, abrazos y achuchones de mamá tras el pecho y echarte a dormir (en sentido figurado, no lo leas de otra manera)

“Estoy muy Vintage” respuesta de L.H. al llamamiento de un amigo que se perdía por sus huesos.

1 comentario:

  1. Si no te quieren como tú quieres que te quieran, ¿qué importa que te quieran?.

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