sábado, 9 de julio de 2011

De Vinilos y Otras Glorias CI

Hemos entrado de lleno en "De Vinilos y Otras Glorias" en los tres números naturales, pero como seguimos esa numeración tan nuestra que es la romana, pues depende, y para seguir a lo grande, un poco de otra cosa.


The Outsiders (C.Q.) 1968


Desde Holanda, siguiendo la trayectoria de otros grandes de ese país por esas fechas, nos visita un grupo que dio mucho de sí y sin embargo no obtuvo el reconocimiento que por su calidad merecía. Este "C.Q." es su último disco, quizás el que más se alejaba del estilo del grupo, con toques descarados de psycodelia y esos ambientes que tanto se estilaban en la época, aunque se siguen apreciando los ritmos de R'n'B' y un poco de ese rock que comenzaba a nacer.
Cuatro músicos buenísimos, que transmitían lo que para mí es lo mejor del grupo, las composiciones, complejas y muy elaboradas, especialmente cuando quieren dar esa vuelta de tuerca  en su estilo, acercándose un poco a "sagrados bastiones" contemporáneos, como Syd Barrett, Hendrix...
Trece temas que se atreven con casi todo, experimentos musicales maravillosamente llevados, como "C.Q.", R'n'B' de memorias infinitas, con las armónicas dando ese toque tan urbano, "Daddy Dies On Saturday", "The Bear", underground con tonos oscuros y garajeros como "It Seems Like Nothing's Gonna Come My Way Today", "The Man On The Dune"; preciosas baladas de melodías suaves ""Happyville", "I Love You nº 2", ; puro rock'n'roll, "Misfits", psicodelia extravagante y maravillosamente caótica, "Doctor" "Prison Song"... hasta terminar un disco completísimo y musicalmente fantástico.
Las voces se alternan y los coros dan una sensación de conjunto muy lograda, pero además la capacidad instrumental de los miembros del grupo hace que en cualquier momento te encuentres con cantidad de sonidos perfectamente utilizados; Wally Tax, la voz solista, culpable de esas armónicas desesperadas, guitarra, flauta, percusión, la batería y percusiones a cargo de Buzz, que mantiene el ritmo en cada tema sin alardes, pero efectivo; Frank Beek al bajo, guitarra, teclados, percusión, voces, culpable de los ambientes en esos temas más elaborados con el "Hammond" aullando, y Ronny Splinter a las guitarras, mucho fuzz y distorsiones, bajo y voces, y los cuatro en conjunto sonando maravillosamente bien.
La portada, una maravilla, en álbum, un diseño del más puro "Pop Art", simple y muy efectivo, y el interior los créditos sobre cada cara de los músicos en un montaje.
"C.Q." un disco de puro Psycho y mucho más para disfrutar de una Música hecha por cuatro tipos geniales en un momento en el cual las ideas aún podían "escucharse"; si te gusta lo bien hecho, no se te pasará por alto, te lo aseguro.





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