De Vinilos y Otras Glorias CMLX

Otro golpe de eso que marcó época, estilos, modos de vivir, de sentir, de hacer Música y lo que conlleva hasta... el infinito.

The 13th Floor Elevators (The Psychedelic Sounds Of The 13th Floor Elevators) 1966

Una andanada de Música hecha por los sueños de iluminados y profetas se cierne sobre nosotros, una manera de sentir los sonidos que nos dibujan inmensos lugares donde todo es posible si la mente se atreve a lanzarse en caída libre para lo que le viene, el océano de la imaginación toma el poder y con ella todo es posible.

The 13th Floor Elevators son capaces de esto y mucho más, especialmente en su primera obra, este "The Psychedelic Sounds Of The 13th Floor Elevators" que con su título ya deja claro qué pretende y por dónde va, para que no tengamos que decir nada al respecto y todos contentos. Pero no es sólo el título lo que da idea de este icono del Psycho auténtico y brutal, la mítica portada, su interior y la contraportada son un manifiesto Psycho en sí mismo, de modo que Roky Erickson y sus chicos no engañan y realizan una de las obras más emblemáticas de la época y del estilo, eso sí con un toque en mi opinión garajero y entrañablemente "sucio" (y que se me entienda como dé la gana) que les lleva un poco más allá en los sonidos abruptos y descarnados que nos ofrecen.

Un disco de desesperados momentos con la voz de Erickson aullando al viento y entregándonos andanadas de trascendente momento vocal con gritos y alaridos maravillosamente combinados a esas guitarras que rompen el espacio de manera salvaje cuando se lanzan a distorsionar mezcladas con el órgano en un constante ir y venir de sonidos lejanos, como si no estuviera.

Momentos de locura que parecen sumergir la Música en el caos, perfectos esos instantes en los cuales la sección rítmica parece salirse de la línea trazada por el tema e irse hacia el infinito mientras las seis cuerdas, la voz y los efectos nos adentran en la mente de sus creadores más allá de lo que realmente se escucha.

Un disco clave para conocer muchas cosas en ese espacio entre la musicalidad y la libertad de creación que algunos iluminados proponían y que dieron como resultado una época maravillosa donde aún era posible. 

The 13th Floor Elevators, cuando soñar es gratis y puede hacernos llegar hasta donde nada ni nadie puede alcanzarnos a través de esa magia llamada Música.