sábado, 14 de junio de 2014

De Vinilos y Otras Glorias MLIX

Grupo de emociones altas y momentos de belleza buscada a través de esos sonidos que siempre me han llevado hasta el infinito.


Audience (Audience) 1969


A pesar de estar siempre encuadrados dentro del Prog. (idea a la cual me adhiero) no se puede negar que los comienzos de Audience, que quedan claros y evidentes en esta su primera obra "Audience" tienen aún en sus composiciones ese toque Psycho que les hacía tan especiales.
Banda de culto en las Islas, mezclaban perfectamente la elegancia de los temas a la hora de escribirlos con esos recovecos musicales que su calidad como músicos les permitían, especialmente a la hora de impregnarlo en el vinilo con cambios y variaciones instrumentales en los cuales el sonido de la flauta, el saxo y el clarinete de Keith Gemmell provocaban el impacto sonoro buscado cuando se enfrentaba a la guitarra de Howard Alexander Werth especialmente con esa acústica que suena a pura seda.
Un disco de grupo, una obra compacta en la cual todo suena donde debe, los arreglos instrumentales son magníficos y buscan esa contradicción que se percibe, la sección rítmica mantiene el nivel (con Trevor Williams al bajo y Tony Connor a la batería) ayudando a enrevesados momentos de los solistas, entre los cuales se cuela la voz de Werth con delicada melancolía, suave susurro que simplemente lleva las estrofas meciéndolas con dulzura.
Cuando la Música puede sorprenderte en cualquier momento y las canciones son una pieza más de ese puzle que permite soñar y viajar a través de nuestros sentidos estamos hablando de calidad y "Audience" es un disco que ofrece esa posibilidad sin esfuerzo, con momentos intensos de sonidos viscerales que atraviesan las entrañas.
El Prog. inunda nuestras vidas de nuevo, lo imposible se hace real con la Música marcando la pauta, no se puede sentir si no es con el convencimiento de que todo puede pasar y venirte esa descarga que discos como este te ofrecen, a partir de ahí es cosa de cada uno llegar hasta las estrellas o quedarse a ras de suelo para sentir lo que quiera.

SIDE ONE:  Banquet;  Poet;  Waverley stage coach;  River Boat Queen;  Harlequin;  Heaven was an Island;  Too late I'm gone;  Paper round
SIDE TWO:  Maidens cry;  Pleasant convalescence;  Leave It unsaid;  Man on box;  House on the hill;  The going song;  Troubles

2 comentarios:

  1. Un disco encantador, fácil de escuchar, simpático, a veces entrañable.
    Te dejo a ti el catalogar esta música que me ha proporcionado una tarde maravillosa.
    Hasta el próximo.
    Ciao.

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