martes, 13 de septiembre de 2011

De Vinilos y Otras Glorias CXCII

Hemos cogido el hilo, así es que seguimos con un poco de lo mismo, de aquella manera pero cabalgando por los confines de lo que no está al alcance de los que no quieren (para gustos los colores ¡¡faltaría más!!)


The Tangerine Zoo (The Tangerine Zoo) 1968


Grupo americano de psycho progresivo muy en la línea de la época (para no desentonar) que basaban gran parte de sus sonidos en el órgano y la fuzz guitar, alternando temas de ritmos desenfrenados y bailables con otros tranquilos y comedidos, profusión de coros y voces cálidas.
Cinco chavales, más que nada porque salvo uno los otros no pasaban de 19 años, que realizan una obra compacta, especialmente a la hora de componer temas, que sin ser largos dejan el regusto de lo bien hecho, melodías que se alternan, órgano y voces, todo perfectamente ensamblado.
Robert Benevides en la guitarra solista, responsable de esa fuzz que arrasa los sentidos, escapándose en los temas por detrás del resto, solos sin mesura y desgarradores. Wayne Gagnon en la guitarra rítmica, dejando que Benevides se lance a lo que quiera mientras él realiza los riffs de los temas, tan psychos... Ronald Medeiros, responsable de ese órgano que lo cubre todo, ambientes y solos, realmente la marca de la casa en las canciones, además de componer la mitad de los temas del grupo (de los otros se encarga Gagnon) y deslizarse con la armónica en algunos pasajes. Tony Tavares en el bajo, sonando en muchas ocasiones por encima del resto, contundente y grave, y para completar el quinteto Donald Smith en la batería, un músico para hacer lo que se le requiere, mantener los ritmos sin más. Todo acompañado o aderezado con coros infinitos en cada tema, tanto de los componentes del grupo como de las voces femeninas que se acercan (suponemos que gustosas y por la pasta) a la grabación.
Nueve temas que, salvo excepción hecha del himno de Morrison "Gloria", donde se dejan caer con una poderosa versión de 6'05'' y "One More Heartache", otro clásico desmadrado por las voces y la sección rítmica que no para, alternan melodías con cabalgadas a ritmo de órgano y guitarra distorsionadas, un disco para escuchar por el placer de saborear Música, muy de la época, donde todo está en orden, sin llegar a las grandes obras pero sin desmerecer de un buen disco cualquiera.

Cara A: Gloria;  Trip To The Zoo;  Please Don't Set Me Free;  Nature's Children
Cara B:  The Flight;  Mommy And Daddy;  Symphonic Psyche; Crystalescent Heaven;  One More Heartache  



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