Visitas inesperadas, viajes hacia otros confines de la Música, y al final encuentras cosas que simplemente son magia, como esto.
Sam Apple Pie (Sam Apple Pie) 1969
Una barbaridad con mayúsculas, esto es este discazo de los ingleses Sam Apple Pie, un disco de Blues Rock en la onda de la mejor tradición británica de este tipo de Música, y eso son palabras mayores, todo sea dicho.
Una banda compacta, sin fisuras, donde se nota el talento y la tradición por igual, músicos con un bagaje musical de clubes y horas y horas puliendo su propio estilo, algo que se nota y mucho en las composiciones descarnadas del disco, donde el viejo blues pasado por las manos eléctricas de los británicos se convertía en auténticos trallazos directos al alma.
Sam Sampson se encarga de la voz, tremenda por cierto, y la armónica en los pocos cortes donde se usa; el toque brutal lo da Mick Smith a la guitarra, un tremendo guitarrista que alterna solos descomunales con riffs auténticamente pesados y de puro corte blusero, acompañado a la Slide por Andy Johnson, secundario de lujo en esos cortes donde las cuerdas te cortan el aliento, y para terminar todo descansa en la base rítmica oscura y poderosa que forman Dog Renny al bajo y Dave Charles a la batería, siguiendo esos ritmos cansinos pero tan de Blues, cuando no asaltan al galope cualquier pieza preparada para ello.
Diez temas que son un recorrido por lo que ya hemos comentado, mucho Blues ("Uncle Sam's Blues" es un descaro) mucho R'N'B y un poco de Rock, para que no falte de nada de lo que se hacía en esa época, y muy bien por cierto. Un comienzo muy a lo Cream con "Hawk" (y no es exagerado lo que decimos) maravillosa la descarga que te cae encima con "Winter Of My Love", una tremenda exhibición de blues eléctrico arrasador, o la steel que te hiela las venas en "Tiger Man", para romperse; guitarras quejumbrosas y lastimeras en "Something Girl", maravillosa, como preciosa es "Annabelle", una sutileza, lo más comercial del disco, "Something Nation" es una forma de moverse si es que no estás muerto, con los ritmos de guitarras rockeros, y no está nada mal el final que dejan para la genial "Moonlight Man"...
Un disco con mayúsculas, tremendo, Blues Rock de muchísimos kilates y altísimo nivel, temas maravillosos, contundentes y unos músicos que van pero que muy sobrados, a partir de aquí cualquier cosa puede pasar si te atreves a escucharlo, porque la verdad es que atreverse es un acierto.
Cara A: Hawk; Winter Of My Love; Stranger; Swan Song; Tiger Man
Cara B: Something Nation; Sometime Girl; Uncle Sam's Blues; Annabelle; Moonlight Man
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