viernes, 9 de diciembre de 2011

De Vinilos y Otras Glorias CCCXII

Nos vamos a tierras apasionantes para la Música, especialmente esta que nos gusta a rabiar, y que se encuentra en las entrañas de un país enorme, porque ahora que lo hemos decidido... el cielo es el límite.


Atlanta Rhythm Section (Quinella) 1981


Hubiera sido lo lógico comenzar una andanada de ARS con uno de sus discos primarios, o en el período de madurez, allá por el 75-76, pero resulta que este maravilloso y maldito grupo sureño fue reconocido por lo que se merecía en el último de sus álbumes, este "Quinella" que además, para mí es lo mejor de lo mejor, y eso que tienen piezas antológicas de buen Southern Rock con mayúsculas, pero es lo que hay, y aunque en los noventa volvieron a unirse no creo en esas reencarnaciones de grupos o solistas más allá de lo que se sabe que dieron, porque para el que suscribe este precioso y exquisito disco fue el adiós de una banda increíble que hacía una Música bella, de calidad y pinceladas de delicatessen que me enamoran.
Con la formación clásica de seis miembros y algún que otro cambio dejado por el camino, la voz maravillosa de Ronnie Hammond maraca el camino, un registro sublime, un vocalista excepcional y preciso, que además ayudaba en las acústicas. Las guitarras se las reparten Barry Bailey y J.R. Cobb, dos solistas de la vieja escuela, no son los cracks sureños que todos conocemos pero su trabajo lo hacen de mil amores. Dean Daughtry en los teclados, otro sonido característico de la banda, ese "Hammond" que se te mete, ese piano, tremendo. La sección rítmica es una burrada, con uno de mis héroes a las cuatro cuerdas, Paul Goddard, una pasada, solista y brutal rompe tripas, acompañado en la batería por Roy Yeager, para que los ritmos no se escapen.
Una banda que sonaba como un todo, un bloque compacto y unido, y así se demostraban a la hora de crear sus composiciones, no hay hueco por donde escaparse, una maravilla de grupo.
Nueve canciones como legado último, nueve temas que conforman una joya del Sureño, comenzando por esa andanada seca y precisa llamada "Homesick", una entrada a por todas que se une a otra tremenda descarga en clave de más Blues rock, "Quinella", cortes de guitarra y la voz por encima de todo. Lo que sigue no tiene desperdicio, una maravilla compositiva, "Alien", un tema perfecto, sobre una base de teclados y guitarra se desarrolla una melodía sublime, un solo descarnado y las voces con coros increíbles. "Higher" te lleva a las estrellas, una cabalgada furiosa y rebelde, a saco, toda una demostración de poderío, algo bestial (ojo al bajo que te patea las tripas).
La cara B entra con "You're So Strong" otra maravilla que a base de teclados te entra en un universo a ritmo de batería y golpes secos, preciosa, punteos continuos por detrás y esa voz... "Outlaw Music" es una balada a ritmo de esa voz que enamora, con teclados y guitarras suaves, relajadas, precioso, siguiendo en la misma línea con "Pretty Girl", algo dulce, delicado... "Southern Exposure" nos lleva a base de acústicas, un paseo por tierras del sur, con los coros arropando el conjunto. Esta joya sureña acaba con "Going To Shangri-La" y a descansar por las emociones que te han atravesado, realmente maravilloso.
"Quinella", una joya de la Música, que sea además sureña en mi caso se agradece, pero no es imprescindible, es simplemente, Música, nada menos que eso, y encima de un nivel que asusta.

2 comentarios:

  1. Una delicadeza de sonidos que los hace únicos, atrapan y acarician sin dar tregua, exquisitos.
    Música para el Alma.. sin duda.
    Un lujazo Agilulfo, y esa portada preciosa.
    Besos.

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  2. Gracias por venir, Jane, disfruta y siéntelos. Besos,

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