martes, 30 de octubre de 2012

De Vinilos y Otras Glorias DLXXXIV

Un poco de mitología para que no todo parezca sacado de la chistera y de la imaginación, sino de esos libros que lo saben casi todo (creo)


Groundhogs (Scratching The Surface) 1968


Uno de los mitos de la Música británica, en este su primer trabajo cuando aún hacían Blues eléctrico salvaje y descarnado, y aún eran capaz de sacarse discos como este que compite con lo mejor de lo mejor que se hizo en el género en esos tiempos.
Tantos aún para hablar de una época gloriosa de este grupazo que poco después giró hacia el Hard con la misma calidad y clase, pero que aquí dan una demostración de lo que sabían a base de aprender de los que sabían más y transformarlo en pura seda pasado por sus manos, pies y sobre todo cabeza.
Blues en estado puro con el toque eléctrico tan de las Islas, realmente impresionante, cuatro músicos en estado de gracia en especial ese icono de la Música que es Tony (T.S.) McPhee, un guitarrista excepcional, genial compositor y tremendo arreglista y además en el caso que nos ocupa se marca cantar en seis de los nueve temas del disco, y dirigir la banda desde esa guitarra incendiaria que no para de abrasarte las tripas, ¡¡qué gozada, joder, qué gozada!!
La otra alma del grupo en este pedazo de vinilo por los sonidos y lo que significa es Steve Rye, compositor, vocalista pero sobre todo armónica, un instrumento al que hace hablar, que te estremece cuando sale de su garganta, realmente prodigioso, y cuando acompaña a la voz...
Ken Pustelnik en la batería marca los ritmos de la manera más clásica y brillante, con ese sentido tan particular de esta Música para llevarte a través de los sueños o la cálida pesadez del Blues cuando te cae encima.
Pete Cruikshank en el bajo marca la parte que le corresponde con continuos recorridos por ese traste que parece va a quemarse.
El disco es una verdadera maravilla, un tema tras otro te van llevando en un viaje a través de esta Música tan especial, desgranándose los temas que caen como fruta madura, bellísima la manera de hacerlos creíbles, tremenda la forma de sacudirte una patada en el trasero cuando quieren hacerte parte de lo que suena, una demostración de lo que debe ser, y en este caso es, el Blues más elegante y british.
Si te gusta esta Música, este disco te va a enamorar, es una pieza de muchísimos quilates en manos de unos músicos excepcionales que entregan pura seda, y cuando algo se hace con el alma, se siente.
¡¡¡Sueña, Disfruta, Siéntelo y Vive la Música!!! en este caso Groundhogs y su "Scratching The Surface" te lo ponen fácil.

Side One:  Rockin chair;  Early in the morning;  Waking blues;  Married men;  No more doggin'
Side Two:  Man trouble;  Come back baby;  You don't love me;  Still a fool


2 comentarios:

  1. Fabuloso, un delirio, sería capaz de escucharlo una y otra vez, y ese tema, "You don' love me"...una locura.
    A esto le llamo, deleitarse a base de buena Música.
    Besos tantos como ilusiones.

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