sábado, 7 de febrero de 2015

De Vinilos y Otras Glorias MCCLXXIV

Desde las antípodas, nos acompaña un grupo para que el "Paseo Por Los Sueños" que nos empeñamos en seguir viviendo llegue cada vez más arriba.


Tamam Shud (Goolutionites And The Real People) 1970


Australia siempre ha dado músicos de calidad que han entendido la Música con esa manera tan particular que les permite verla desde el "otro lado del mundo" (según se mire, por supuesto) y en el caso que nos ocupa, Tamam Shud es otro ejemplo de calidad y seda a la hora de crear sonidos.
Entre la Psycho tardía de la nueva década que comenzaba y el Rock Prog. según qué momentos, se desliza este "Goolutionites And The Real People", segundo y último disco de la banda (si obviamos reuniones de decadencia décadas después para...) en el cual derraman todo lo que tenían consiguiendo un disco completo, con una estructura de canciones compleja y que permiten, desde la composición, llegar a la perfecta interpretación por parte de los músicos.
Todos los temas compuestos e ideados por Lindsay Bjerre, voz y guitarra rítmica del grupo, un sonido que sugiere los momentos de desánimos y desasosiego del alma, oscuros, trágicos en ocasiones, moviéndose entre la pesadumbre y el instante de transgresión, con recitados que son como muros que caen para aplastar lo que encuentran. Esta manera de cantar se acompaña por los momentos de pesadez instrumental, los cuales nos llevan de la mano por un paraíso de decadente deseo, inmensos impactos emocionales que remueven las entrañas, con la guitarra de Tim Gaze arañándote a veces la piel, dejando que todo se descomponga; el piano, también usado por Gaze no es sino el clavo en ese ataúd de sueños rotos y apoyo a la guitarra que quiere romper con todo.
El bajo de Peter Barron y la batería de Dannie Davidson completan el aplastamiento que los sentidos sufren cuando se dejan abrumar por (y en esto no debe haber duda) la belleza que emana desde la angustia contada en clave de Música.
"Heaven Is Closed" es la perfecta demostración de la Música que el grupo nos ofrece, con esa aventura hacia el lado oscuro como contrapunto a la maravillosa recreación musical. "A Plague" puro éxtasis con una banda entregada y la guitarra lacerándote. Orgía sensorial en las dos partes de "Goolutionites Theme" donde todo es posible y un poco de alivio en pedazos de sensibilidad como "Stand In The Sunlight" y "Take A Walk On A Foggy Morn".
Para disfrutar de momentos en los cuales la luz y la oscuridad no dependen de lo que nuestros sentidos aprecian, sino de lo que nuestra alma desea.
  

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