NUEVOS SONIDOS ROMPIENDO
EL SILENCIO: PARTE II
Decir que el rock Sureño vuelve a sus días gloriosos
creo que es evitar la realidad y mirar para otro lado, primero porque es
inimaginable que se vuelvan a reunir la cantidad de talento y el momento en el
cual surgieron, cuando la libertad de demasiadas cosas aún se podía hacer,
después porque a pesar de la evolución y las nuevas tendencias la base sobre la
que surgió y de donde procede no está siendo usada de la misma manera por los
grupos actuales, que si bien no se les puede negar la calidad que tienen cuando
es así no llegan a esos sublimes grupos y artistas que deambulaban por el orbe.
Que el Sureño no morirá eso es seguro, que mantendrá
la esencia de donde viene y para lo que se creó lo intentarán todos los músicos
descendientes de esos creadores únicos pero salvo excepciones que lo eleven a
lo que fue por talento y clase la época gloriosa de este estilo tan especial se
dejó en la década en la cual la carretera, el olor a acero quemado y el
chirriar de las guitarras rompían el silencia cuando se entonaban los himnos de
cuarenta minutos en las eternas jams.
Quizás las influencias actuales de otros estilos y sonidos
que quieren también mezclarse con la sangre de esta Música, al igual que en sus
comienzos ella buscó una mezcla que parecía imposible y dio lugar a la magia,
haga que la vuelta a esos orígenes sea complicada y difícil, sobre todo porque
si de mirar hacia adelante se trata eso sería dar pasos en falso, pero de lo
que no me cabe duda es que la escucha de los iconos de lo que fue el comienzo
de todo, las revisiones de los grandes temas hechos de mil maneras y formas
(ojalá que con el respeto y admiración que se merecen) seguirán siendo la base
del aprendizaje de los músicos que después trasladarán a su manera particular
de sentir los sonidos estas ideas y desde ahí… quién sabe.
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