viernes, 3 de abril de 2015

Manfred Mann's Earth Band


No puedo decir que esté contento del lugar que habito desde hace unos años, me siento ajeno a lo que soy y lejos de quien amo y de lo que amo, pero si en algo puedo sacarle partido de lo poco positivo que me depara encontrarme a una eternidad de lo que me hace ser, es la posibilidad de escuchar en directo a mitos que han sido parte de mi historia desde hace décadas.

Manfred Mann's Earth Band se presentaba el 30 de Marzo en ese lugar donde no soy pero lo intento y tras comprobar que el gran Mick Rogers (una de mis debilidades acariciando las seis cuerdas) venía con ellos, me decidí a verlos.
Un concierto para la historia, un memorable set de 110' en los que MMEB demostraron por qué la Música es lo que es y no lo que nos quieren vender. No hicieron nada que no lleven haciendo desde hace quince años, no intentaron vender humo a pesar de tener en el mercado un disco desde hace nada, no quisieron transformar lo que no era porque no lo necesitan, simplemente fueron ellos y con eso les bastó para realizar un memorable concierto de Rock Sinfónico Prog. con todo lo que hay que hacer para que sea... magia.

La duda de siempre, la eterna posibilidad de cualquier concierto realizado en este puto país de mierda en lo musical, el sonido y lo que significa para disfrutar de la gloria, se despejó en los primeros compases del "Spirit In The Night", cuando la guitarra de Rogers y los teclados de Manfred se unieron para devolvernos a los primeros setenta y hacernos soñar.

Setenta y cuatro años y en plena forma, uno de los más grandes teclistas de la historia del Rock demostró el por qué de ello, deleitándonos con solos al uso, momentos de magia envolviéndolo todo y esos duetos en paralelo con las seis cuerdas que hacían que me elevara del asiento sin quererlo. En cuando al motivo de mi deseo por ver a la banda, la debilidad llamada Mick Rogers no sólo me dio lo que esperaba, ese concierto de épica guitarrística que cualquiera espera de un genio como él, sino que además me cubrió de un manto de belleza con los solos demenciales más allá de la propia Música, los momentos de soledad en el escenario en los que repasó Rock'N'Roll clásico, inesperados instantes de clasicismo eterno y obras de culto con una guitarra que echaba fuego, acariciaba la piel y te arrastraba al infinito por igual, simplemente genial.

Una demoledora sección rítmica nos mantuvo a todos arriba, muy arriba, la batería de Jimmy Copley era tan bella de ver como intensa para escuchar, un músico que está tan sobrado para lo que hace que se permitía ser el encargado de los cambios de ritmo y giros estremecedores que la banda realiza en cada tema, y no son uno, ni dos, ni tres, ni... al compás de unos timbales que te hacían crujir el estómago de puro placer. Steve Kinch no toca el bajo, lo sueña y te lo hace soñar, un instrumento que deja de ser parte de lo que no se presume y pasa a formar un todo con el sonido que te llega, perfecto, inmenso, demoledor y en ocasiones suave y delicado para dejar que... la sorpresa de la noche regale con su voz lo que nunca te esperas, porque Robert Hart en su rol de voz solista que sabe hacer, estar y desaparecer cuando debe nos regaló una sesión de registros con los que abarcó ese Rock de siempre, hizo suyo lo clásico y se marcó viajes hacia el Blues más puro y emocional como para acallar a cualquiera.

A mi derecha un niño de doce años disfrutaba como loco con una Música que no debería ser ni de lejos conocida por su generación, porque de hecho ni siquiera debería ser de la mía dado el set que nos regalaron, pero mi querido Alberto tiene en su progenitor un inmenso profesor de emociones y delicadezas con las que empaparse, y ver a un chaval gozar como él estaba haciéndolo me llevaron a las estrellas por enésima vez en la misma noche, tras dejar atrás "Father Of Day, Father Of Night" (inmenso Mick a la voz) "For You", Mighty Quinn", "Blinded By The Light", "Davy's On The Road Again", "Martha's Madman"... y cuando la magia de la Música se hace real pasan cosas como la que vivimos, Robert Hart regalándole en mano el Set List a Alberto en un gesto que reconocía que la Música es eterna y que los músicos que no sólo hacen Música sino que saben qué y por qué, se dan cuenta de esa magia cuando se expande y nos cubre a todos.

Vivir la noche con la MMEB fue otro viaje al infinito, compartirla con cinco personas de cuento que estuvieron extasiadas más allá de la propia sala me hizo sentir de nuevo las noches eternas de "Estudios MAG", las madrugadas de joven y no tan joven a la luz de la luna con el agua del lago Proserpina acariciando mis sentidos, los días eternos en Discos Melocotón y las horas de placer sensorial con la Música, mi amiga, amante y eterna musa de sentimientos encontrados.

MMEB puede ser una banda al uso, quizás haga lo que se espera, pero esos cinco monstruos en el escenario dan una lección de amor por lo que hacen que estremece, y eso al final es lo que llega, además de saber que la guitarra de Mick te va a atravesar el alma, los teclados de Manfred arañarán tu piel, la voz de Robert hará que tu entrepierna se abra un poco más y esa sección rítmica te patee con gusto y mucho placer lo que le dé la gana.





A mi Amor, por todo; a César por enseñar tan bien como lo siente; a Alberto por aprenderlo; a Mª Paz porque sigue creyendo en ello y a Jose porque la eternidad tiene nombre.
Gracias por hacérmelo más fácil.

4 comentarios:

  1. Eso es, siempre hay un lado positivo al que arrimarse para evitar caer. Y si ademas tiene esta magnitud...
    Imagino que disfrutaste como ese niño de12 años. Porque para la música no hay edad.
    Un beso y un abrazo de oso.

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    1. El beso al niño de 12 años, el abrazo... ya veremos.
      Besos

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  2. Puedo decir que la magia verdaderamente existe, es algo que no dudo porque me lo dicen momentos inolvidables de Música y emociones...y tu, has descrito de forma maravillosa uno de ellos.
    Gracias por contagiarnos de esa locura tuya por la Música.
    Besos.

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    1. La magia cada uno la siente como desea, y lo único que puedo hacer es decir que se busque. Si la has encontrado, maravilloso.
      Besos

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