miércoles, 3 de abril de 2013

Hablando De...


Los espíritus mediocres suelen condenar todo aquello que está fuera de su alcance.
Quizás por esto, y no por nada más, esos sonidos que nos llevan, enamoran, hacen ser, estar en los umbrales de lo abstracto y renacer cada vez que nos acarician la piel suelen ser como ladrillos que caen en su mente, ese asidero del cuero cabelludo que les sirve para engalanarse con gorras y sombreros floridos o lucir las calvas de la falta de ideas.

Es cierto, ¡¡vive el cielo que lo he sentido!! que esos ojillos que expresan la incredulidad de sus intelectos rociados por el dogma de lo que no es, miran de reojo a los que nos excitamos con el placer de una melodía que susurra, una voz que adormece, unos sonidos que pueden expresar la sensibilidad de un alma y se inyectan de eso que ellos llaman dignidad y que en un lenguaje que no alcanzan se denomina bilis, porque al final, esos "ruidos" que se empeñan en despreciar provocan la sonrisa en otros a los que pretenden emular, eso sí, a su manera cual reptiles de repugnantes lenguas bífidas.

Criaturas son, cierto es, criaturitas de pequeño tamaño en lo emocional y grandes aspiraciones en lo angosto de sus tragaderas, esas que de pronto se van ensanchando cual elástico sin final, y desde ese lugar abierto y dilatado se permiten vocear a los cuatro vientos su manera de entender lo que es pura seda y mancillan, gloria y ensucian, genuinas formas de sentimientos que no pueden comprender porque he aquí que son, ellos y ellas, simplemente, mediocres.

Es lo que tiene, ser libre de espíritu lleva donde no se alcanza si no es con el corazón dispuesto y las entrañas entregadas, para saborear, degustar y juzgar lo que nos hace estremecer por el placer de los sentidos, al margen de aquello que por deber ser ha de tener cabida en lo que honra lo bien hecho, lo exquisito, lo maravilloso. No es, ni será nunca lo que deba ser, sino lo que pueda llegar porque atesore calidad, clase, esa magia que la Música transforma en...
Y hablando de... esos espíritus que son mediocres a pesar de quererlo.









2 comentarios:

  1. Una cosa puede decirse y es que en cuestión de sonidos, de sentimientos, de saber llegar más allá, tú te sales de la fila. Y eso me encanta.
    El hecho de haber conocido y amado (cogida de tu mano)a gente que jamás estará en ninguna fila o lista ha sido una de las experiencias más gratificantes de los últimos años.
    Un beso enorme para los que saben llevar sus pasos fuera de las líneas que marcan los que creen que mandan.

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    1. Un Beso enoooooooorme para quien sabe recibir lo que se le entrega con el alma limpia y la mente abierta.

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