viernes, 13 de enero de 2012

De Vinilos y Otras Glorias CCCXLI

Un músico por el cual siento auténtica devoción, un guitarrista maravilloso que ahora nos visita cuando se lanzó al ruedo, ¡y de qué manera!


Mike Bloomfield (It's Not Killing Me) 1969


Tras su paso por formaciones míticas, en este año 69 Bloomfield se lanzó a crear su primer álbum en solitario, con canciones compuestas por él mismo y un puñado de músicos excepcionales que de una u otra manera le ayudaron en la creación de esta pieza que es un ejemplo de su calidad y una muestra de lo que amaba dentro de la Música.
No es el mejor disco de este guitarrista americano, porque sus intervenciones en bandas de ensueño fueron realmente geniales, pero al menos es un muy buen disco de Blues, R'N'B y Rock de muchos quilates, porque la calidad de los que participan en él consiguen elevarlo un poco más allá de lo que pudiera ser, y sobre todo es un documento para valorar a este tipo que por fin se logró liberar de la etiqueta de guitarrista de bandas y ser por él mismo, y en ese sentido me gusta, porque destila honestidad y buen gusto por todos los surcos.
Junto a Mike Bloomfield, que toca como los ángeles (para variar) las guitarras, el piano y los coros de vez en cuando, encontramos un grupo de amigos y colegas de antiguas formaciones y colaboraciones varias que lo bordan, la voz de Nick Gravenites  es sublime, guitarristas como Fred Olsen y Michael Melford, teclistas de la talla de Ira Kamin, Mark Naftalin, Roy Ruby; Bob Jones a la batería, John Kahn en el bajo, Orville Rhodes con la steel y una sección de vientos para quitar el hipo, a saber: Ron Stallings, Mark Teel, Gerald Oshita, Noel Jewkis a los saxos, junto a John Wilmeth y Marcus Doubleday en las trompetas.
El disco es un recorrido por la Música que amaba Bloomfield, especialmente ese Blues quejumbroso y de raíces, piezas que te transportan en el tiempo y que se mezclan hábilmente con pedazos de Rock y algún que otro toque de pantanos, diez temas maravillosos que te hacen paladear la Música de cualquier tugurio entre humo, bourbon, desechos humanos y algún que otro despistado que acabara enamorándose de estos sonidos de siempre, porque realmente son eternos.
"It's Not Killing Me" es un discazo de pura Música, pero como este tipo hizo cosas tan increíbles, quizás se es injusto con él, aunque a mí escuchar esas seis cuerdas resbalando por la piel, la voz de perdedor impenitente y las teclas que te abrasan me sugieren pura magia, y Mike la tenía entre sus dedos.

Side 1:  If you see my baby;  For anyone you meet;  Good old guy;  Far too many nights;  It's not killing me.
Side 2:  Next time you see me;  Michael's lament;  Why must my baby;  The ones I loved are gone;  Don't think about It, baby

2 comentarios:

  1. Escuchar a Mike Bloomfield en solitario o junto a Al Kooper y Stepehen Stills, siempre será un placer.
    Gracias por avivar recuerdos lejanos.
    Saludos amigo.

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  2. Un grande, un músico excepcional, un genio de las seis cuerdas, simplemente Mike Bloomfield, Joker. un Saludo.

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