domingo, 7 de junio de 2015

De Vinilos y Otras Glorias MCDXXI

Nuevas sensaciones viajando por el espacio de los sonidos para regarnos de esa magia que nos hace ser, a pesar de todo y de todos.


Blue Mountain Eagle (Blue Mountain Eagle) 1970


Lo de las épocas y el momento o la suerte y el saber llegar. Blue Mountain Eagle es una banda con poco que envidiar a muchas de las que existían en la privilegiada y maravillosa época que les tocó vivir, un grupo de músicos excepcionales que saben de esto más que la mayoría y unas ideas musicales con un nivel más que alto.
Sin embargo cuando el disco homónimo, su primera obra, vio la luz allá por el año 70, pocos se atrevieron a conseguir esta maravilla de sensaciones que es "Blue Mountain Eagle". El disco no tiene nada que pueda indicar su fracaso comercial, de hecho se puede decir que es un trabajo lineal pero referido a la calidad y clase de sus composiciones, todas ellas de nivel muy alto y al más puro estilo de las bandas californianas y americanas en general del momento.
Psycho, Rock y un toque de Folk americano se dan cita en los diez temas que componen el disco, una demostración de enseñanza musical que viene por el pasado de la mayoría de sus miembros, llegados de bandas de pedigrí que son historia de la Música. El halo de musicalidad desprendido nos recuerda sin esfuerzo sonidos de Buffalo Springfield, Byrds, FBB... todo ello mezclado con la personal conjunción de los músicos que componen Blue Mountain Eagle.
Los fastuosos conjuntos corales son el primer paso para enseñarnos de qué va a ir este disco, maravillosos los temas cantados en clave solista o los coros que se van juntando de vez en cuando para deleitar de manera preciosa los oídos a los que llegan. A partir de aquí todo parece encajar y las guitarras, a veces ácidas, a veces duras, a veces tan suaves como susurros de acero, son la punta de lanza de unas composiciones que se dejan escuchar con la facilidad de algo que entra sin esfuerzo, de manera natural, impregnándote de la belleza que atesoran.
Un disco para disfrutar de la Música en estado puro, aportando un toque personal y siendo parte de esa historia irrepetible que entregó pequeños monumentos olvidados y que se pueden recuperar, eso sí, si el atrevimiento se contagia y las ganas por saborear la Música nunca se acaban.
David Price guitarra y voz. Randy Fuller bajo, guitarra y voz. Bob Jones guitarra y voz. Joey Newman guitarra, teclados y voz. Don Poncher batería y voz.

I:  Love is here;  Yellows' dream;  Feel like a bandit;  TRoubles;  Loveless lives
II:  No regrets;  Winding your string;  Sweet Mama;  Promise Of Love;  Trivial Sum

2 comentarios:

  1. Precioso, con ese encanto reconfortante de melodías creadas para abrir sentidos, para sensibilizar, de voces que te hacen desbordar en satisfacción por el buen momento.
    Una gozada.
    Besos.

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    1. Un disco que permite saborear la buena, exquisita Música que se hacía cuando el talento rebosaba por todos lados. Un trabajo tremendo que me alegro te guste.
      Besos

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