Tabletom (Mezclalina) 1980
Como dice Javi, mi querido Amigo y colega de sesiones musicales en Harmony Rock, esa voz "no puedo con ella..." y quizá sea lo que hace que Tabletom te diga algo más o no te diga nada porque te puede reventar los sentidos.
En lo que a mí respecta, las letras grabadas a fuego desde lo inexplicable por R. González me parecen un poco más de la idiosincrasia de un grupo que nunca debió existir, pero que es parte de su propia esencia, porque te las escupe a la cara, te guste o no.
Y es que "Mezclalina" es un disco fuera de lugar, de época, de sitio, de espacio, de momento, de... todo ¡¡¡rediéz!!! porque estos tipos del sureste español, allí donde el mar y las emociones surgen de otras cosas, reinventaron la manera de concebir un Rock Andaluz fuera de sus propias raíces, creando un discazo de Prog. ajeno al propio estilo y lleno de una vitalidad que asusta.
Exceptuando el primer tema, ese "Tipos Duros" que homenajea a Piyayo, un personaje de cuento y eterno, y que se para en los 4'17'', el resto del disco es un desarrollo constante del tiempo musical con el saxo como base y los vientos varios apoyando una poderosa sección rítmica que te patea el culo en cada instante.
Fuera de lugar, de época, de... estilos, de formas, un disco que se te mete dentro sin preguntarte el por qué de lo que quieras o no escuchar, sin importarle lo que pienses de él, porque les da igual, simplemente debían hacerlo y lo hacen de una manera tremenda.
No es un trabajo de gustar y ya está, el rechazo si no te llega es inmediato porque usa y abusa de una manera de crear Música que se nutre de una esencial manera de pensar (la zona y todo lo que le rodea hace mucho) y esa voz te pone o te indispone, como le pasa a Javi y a otros, porque "lo decisivo fue la mezcla, y esa mezcla sólo ocurrió en Andalucía" al menos en creaciones como esta.
Si se quiere entender todo lo que sucedió en unos momentos en los que no era fácil salir de dos o tres ideas que se repetían demasiado, creo que "Mezclalina" es un disco para disfrutar, degustar y abrir la mente un poco más, pero si te ciñes a lo que te dejan y debes escuchar, pasar página es lo más seguro para no disturbarte. Eso sí, cuando lo prohibido comienza a tener sentido, hay que zambullirse en lo que te araña la piel y te pone los sentidos alerta (voces aparte)
Cara A: Tipos Duros; Ininteligible; Mezclalina
Cara B: Zero - Zero; La Guerra
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