Dentro de esas debilidades que uno tiene, un músico que es capaz de sacarme la piel del cuerpo cuando escucho esa guitarra que habla sin necesidad de palabras. Queridos y queridas, niños, niñas y los que quieran, con vosotros...
Roy Buchanan (Rescue Me) 1974
El final de una etapa la escribió Roy Buchanan con este "Rescue Me", su último trabajo con la casa de discos que creyó en su genial talento y le hizo aparecer en el mundo de los sonidos de manera... pues eso.
Soy un enamorado de Buchanan y su forma de hablar a través de su compañera, y estos primeros años me parecen de una pureza musical que me vuelve loco, por eso, a pesar de notarse en cierto modo ese final y giro hacia otro lado, el disco sigue destilando el gusto por lo clásico y una dosis de sonidos guitarreros tan especiales como únicos, de los que hacen que te abras en canal para que te posean sin mesura.
Con una banda que acompaña al genio y lo cubre en su justa medida (salvo la voz de Bill Sheffield que se convierte en protagonista de la otra parte de los sueños) la guitarra deshace cualquier atisbo de defensa cuando suena y consigue que los sentidos se sometan a ella manejadas las seis cuerdas por las manos de un músico único y sin igual. El mejor guitarrista desconocido de la historia se gusta y gusta, en otra exhibición de cómo llegar al alma con su guitarra, con momentos tan estelares como brutales en el concepto (la emoción de "In The Beginning" contrasta con esa animalada que se marca en "She Can't Say No" o la delicadeza desde las sombras de "CC Ryder" y "Wayfairing Pilgrim") con una manera tan personal de hacer que sus cuerdas vocales se conviertan en las del acero que se apoya en la madera y de allí hasta ese lugar donde los sueños toman forma.
Maravillosa la portada con esa foto del perfil de Roy, tan lejos de todo como cercano a su Música, y excepcional esa contraportada con lo que puede sentirse con las manos acariciando a su compañera en una postura tan impensable como buscada para amarla.
"Rescue Me" se puede considerar un disco más de Música al uso, pero creo que tiene impreso en lo que da el sentimiento de un hombre que hacía Música porque la necesidad de respirar era eso, un genial guitarrista que podía expresar con su amante y compañera de seis cuerdas lo que su personalidad no le dejaba hacer ver y transformarlo en algo único.
Roy Buchanan guitarra. Bill Sheffield voz. Neil Larsen teclados. Kenny Tibbetts bajo. Bill stewart batería.
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