domingo, 9 de noviembre de 2014

De Vinilos y Otras Glorias MCCXX

Volvemos a una Música que para ciertos instantes es como sentir que estamos "Paseando Por Los Sueños".


Shadowfax (Shadowdance) 1983


En ese período en el cual se buscaban nuevas formas de expresión (lo buscaban los medios de comunicación y sucedáneos ya que las formas de expresión musical estaban ahí hacía tiempo) al amparo de la mal llamada "Nueva Era" nacieron grupos como Shadowfax, de trayectorias más o menos duraderas, que mostraban el gusto por esa Música refinada entre lo tradicional y lo clásico.
Con conceptos musicales de alto nivel por el virtuosismo de sus integrantes, este tercer álbum asentó al grupo entre un público amante de estos sonidos distintos a lo que se escuchaba pero ya entregados tiempos atrás (un primer álbum sacado nada menos que siete años antes no tuvo acogida) y en muchos casos se considera la primera obra de la banda su "Shadowfax", al menos en el sonido que querían mostrar.
Música suave y estilista, con dos compositores por encima de lo demás, Chuck Greenberg, alma y creador del grupo, pensador incansable y sobre todo seña de identidad del sonido de la banda con ese lyricon que rezuma hermosura por todos lados y el saxo que rompe de frente con el resto de las notas sacadas del vinilo. El otro responsable de las canciones y compositor es G.E. Stinson, guitarrista y pianista en el álbum y un alma sensible a la hora de acariciar los acordes.
La sección rítmica, que en momentos no existe por la propia manera de creatividad de los temas, se compone de Phil Maggini al bajo y Stuart Nevitt en la batería y percusión, pero cuando entran en juego forman la cúpula bajo la cual los sonidos se pierden entre melodías delicadas y sueños deseados. En este "Shadowdance" se agregan al grupo Jared Stewart, cuyo trabajo en los teclados y el pieno marca un nuevo giro en el sonido de la banda, y el violín y los instrumentos indúes de Jamii Szmadzinski, con el cual se consigue ese efecto de tradicionalismo que supera fronteras por el las notas llegadas de otras tierras.
Música para perderse con uno mismo o donde la mente desee y cómo, una de las primeras bandas al otro lado del océano (según se mire el Océano, claro está) en lanzarse a esta simbiosis que algunos quisieron elevar en lo culto pero que no deja de ser Música, y si está hecha con gusto y elegancia, como es el caso, Música de la que siempre buscamos, de calidad.
Para tus sueños imposibles o esos momentos en los que soñar se deja para la siguiente ocasión.

Side One:  New electric India;  Watercourse way;  Ghost Bird;  Shadowdance
Side Two:  Brown Rice/Karmapa Chenno;  Distant voices;  A song for my brother

2 comentarios:

  1. Una maravillosa llamada a la profundidad de los sueños y una manera de deleitarse a base de música hecha con una delicadeza de sonidos alucinante.
    Precioso.
    Besos.

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