Siendo como soy un
friki, o mejor dicho “El Friki” por excelencia me resulta extraño observar
desde este lugar de privilegio que ocupo desde hace… (ni lo sé porque esto de
ser un busto de material extraño me resulta de un molesto) la cantidad de seres
humanos, esos que no entienden de nada y menos de mi arte, que pasan
últimamente por esta tienda de discos de vinilos y otras cosas saludando de
manera efusiva a Eduardo, este tipo que sin llegar a ser un friki como yo
mantiene intacto el espíritu musical que es lo único válido en este mundo de
mierda y que tuvo a bien colocarme en este pedestal desde el cual puedo ver
todo tipo de cosas y sobre todo escuchar la buena Música que afortunadamente se
empeña en seguir poniendo.
Eduardo y su hermano
Pablo, que hace tiempo no me acompaña pero que también me gustaba porque su
espíritu libre y salvaje en esto de la Música me recordaba los tiempos de
escapadas mentales y discos nunca producidos por esos productores de mierda que
no sabían apreciar la buena Música. Dos tipos encantadores que parece ser que
se van porque (la verdad como no entiendo nada de nada de lo mundano y lo que
se cuece en estos mundos de desvaríos) se ha acabado un ciclo.
¡¡Pues ya me jode,
oye!! porque estaba la mar de bien colocado aquí escuchando y escuchando buena
Música y sin tener que soportar a nadie, bien es cierto que a veces la envidia
me corroía la entrañas cuando escuchaba esos maravillosos temas que sonaban una
y otra vez y esas guitarras asesinas arañando el aire, especialmente cuando
Eduardo quería hacer ver a la gente que discos como los míos se pueden escuchar
porque son maravillosos, no porque hagan ruido y sirvan para estrangular a
alguien (eso para los productores y dueños del negocio musical de mierda) o de
algunos colegas tan locos como yo que hemos hecho de la Música una escapada a
otro lugar fuera de este mundo.
Y es que tengo que
reconocer desde mi estatus de genio que estos dos tipos tienen un gusto musical
exquisito, tremendo lo que ponen y enseñan a quienes vienen por aquí, genial su
forma de hacer ver a la gente que le interesa cómo y por qué de lo que se llama
Música, eso sí, desde la perspectiva innegociable del Rock y lo que conlleva
¡¡vive el cielo que si no, no hubiera estado aquí plantado todos estos años!! pero
sin límites ni escusas baratas, desde esos momentos de los que comenzaban el
camino del Rock desde el Blues de los orígenes, el Pop, el Folk… hasta los que
nos lanzamos de cabeza a dar por el culo a todo lo establecido y pusimos patas
arriba el negocio ¡¡qué jooooooé!! Que de eso se trataba cuando aparecimos en
aquella casa de discos de colgados con nuestras pintas y casi le da algo a la
chica de la entrada. Frikis, sí, pero haciendo Rock, Música, mucha y buena Músicaaaaaaaaa
como la que se destila por aquí con estos dos tipos que parecen sacados de un
tebeo de los que siempre quise meter en los insert de mis discos y no me
dejaron esos payasos de productores y casas de discos de mierda.
La verdad es que
mirándolo bien podían haber salido en alguna portada, ahora que se ha reeditado
el “Freak Out”! al fondo a la derecha podía estar Eduardo y hacerle un hueco a
Pablo que con bigote y barba como guitarrista podían pasar como parte de
The Mothers Of Invention ¡¡menuda juerga nos hubiéramos corrido juntos!! pero la historia es
lo que tiene, unos nacemos para genios de la Música y otros nacen para ser
genios en eso de entenderla, valorarla y entregársela al resto.
No me arrepiento de
estos años por aquí, he visto de todo, gente, gentita, gentuza, elementos de
pobres ideas, enormes coleccionistas de discos, tipos que sabían quién era
Frank Zappa (¡¡casi nada el niño ese con la melena!!) otros que no se enteraban
de nada, enteradillos de medio pelo, tipos con ganas de aprender escuchando mi
guitarra y en medio de todo esos dos frikis que son ya como colegas de locuras
varias enamorados de la Música y enseñando, abduciendo, comentando, hablando…
ha estado bien, pero que muy bien. Además si se van y acabo por ahí perdido
(como siempre durante mi vida, por otra parte) puedo decir que Frank Zappa ha
aprendido del Pop Rock español de los sesenta y setenta como nadie entre los
que conozco y no me lo esperaba, acostumbrado a pensar que por aquí sólo había
flamencos y faralaes escuchar algunas bandas de lo que se hacía ha sido una
gratísima sorpresa.
¡¡Coño, ahora suena
Acid Mother Temple & The Melting Paraiso U.F.O.!! Lo dicho, estoy en mi salsa, lástima lo de no poder agarrar
la guitarra y joder a más de uno con el mástil por el culo mientras les enseño
cómo va eso de hacer lo que le sale del alma con clase, talento y mucho
sentimiento por estar fuera de este mundo, porque los que somos como Eduardo,
Pablo, Captain Beefheart, Ray Collins, Jim, Roy, Elliot y por supuesto el más de
lo más Yo Mismo, estamos fuera de este mundo desde hace tanto tiempo que ni se
sabe. Quizás lo de irse de la tienda Discos Melocotón (¡¡joder con el
nombrecito!! podía ser “Peach Discs” que es más fácil de pronunciar) no es en
realidad eso, es abandonar este planeta de mierda para encontrarnos todos en
ese lugar donde los frikis vivimos a nuestras anchas haciendo esos ruidos que
nadie entiende, esas distorsiones locas para reventar los tímpanos y sobre todo
expresarnos con lo que el alma nos da y como de eso Pablo y Eduardo saben mucho
será que la solución a lo de la tienda es esa, escapar por fin donde les
entiendan ¡¡Qué bien!! Pero si son unos frikis, especiales, como debe ser, pero
si tienen un logo con una guitarra aplastando un “Peach”, si lo llego a saber
me hubiera servido en mis actuaciones en directo, reventar la fruta con mi SG a
grito pelado y echársela a los mamarrachos esos que no sabían de qué iba el
rollo.
Bueno, a pesar de ser
un genio y gustarme cuando hablo porque escucharme me apasiona, realmente lo de
esta pequeña demostración de palabrería es un homenaje a estos dos tipos y el
lugar donde me han dejado vivir tanto tiempo disfrutando, de modo que voy
acabando diciéndoles a Eduardo y Pablo, Pablo y Eduardo que lo suyo ha sido una
pasada, que han enseñado lo que es la Música de calidad (sólo la Música de
calidad) a tanta gente que durante décadas aún se podrán escuchar mis discos y
otros del mismo pelo que antes era impensable y que gracias a ellos las locuras
se convierten en maravillosas y la manera de amar la Música algo tan natural como
mis solos de guitarra (porque soy un genio, joder)
Besos, abrazos y
achuchones exótericos, plutonianos y frikinianos, sobre todo muy frikinianos.
Totalmente de acuerdo en todo, amigo Frank ;)))
ResponderEliminarSer genio y estar colgado de un pedestal tiene esas cosas.
EliminarUn Abrazo,