Entro en la nada y ella me envuelve. Siento el frío de la noche y el silencio se enrosca a mi espalda. Más allá de esas piezas que etiquetan a los seres humanos, hay un momento en el cual todo se salva, a pesar de los mediocres que siguen resoplando para que no se escuche, a pesar de todas las cosas que son porque nadie quiere detenerlas.
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