Desde el lugar donde lo prohibido comienza a tener sentido
Energy Orchard (Shinola) 1993
Una entrega más para el recuerdo del gran grupo irlandés de los noventa, bastante menospreciado y nunca reconocido, y me llama la atención que en un país como Irlanda, donde esto de la Música se cuida hasta morir, fuera así.
Quizás lo de Bap Kennedy nunca fueron las relaciones sociales, o socializar, que puede parecer lo mismo pero no lo es, y la mala prensa que le acompañó siempre no ayudara, pero la verdad es que volver a Energy Orchard me sigue sugiriendo momentos de jornadas intensas con amigos rozando ya la treintena, cuando buscábamos ese soplo de aire fresco que la Música volvía a encontrar después de una década de exilio.
La voz sugerente de Bap comienza a entrarnos por la piel, acompañada de la guitarra de Paul Toner que da el toque justo, preciso, en esos arpegios medidos y calculados de una Música que casi se adentra en los confines de Irlanda y busca fuera de sus fronteras en los posos eternos del Rock.
Momentos para la dedicatoria sentida y emocional a un alma irlandesa como Van Morrison con la versión delicada de Madame George, contando con la inestimable ayuda de una mujer a la que le sale la sensibilidad por cada poro de su piel cuando toca el oboe, el saxo... Kate St. John, y después más Rock, más del terruño con la tradicional "The Star Of The County Down" y piezas acústicas sin precio con una banda lanzada a lo que la década clamaba.
Kevin Breslin se luce con los teclados cuando de llamar la atención se trata atravesando las guitarras y el espacio que dejan vacío de notas, viajando entre la nada, llamando a la sección rítmica que marca, y marca, y marca, y nos lleva en volandas, entre sonidos de antaño, de siempre, y lo que en la época se intentaba.
Once canciones que son parte de las enseñanzas que estos tipos tenían metidas en vena desde que nacieron, lo que su talento transformó y lo que les dejaron hacer, que no es poco, porque "Shinola" es un disco para disfrutar con la honestidad de los que aman la Música, se meten en ella y la llevan en las entrañas dándola en lo que saben y pueden, que en este caso es una barbaridad.
Salvo a los popes que se les acabó el fuelle en el año del Señor de 1.898, un disco para sentir en la piel lo que otros no son capaces de conocer aunque lo vean delante.
Bap Kennedy voz, guitarra, armónica. Spade McQuade bajo, mandolina, voces. Paul Toner guitarra, voces. Kevin Breslin teclados. David Toner batería.
Quello: Coming Through; Madame George; Atlantic City; Stay Away; Don't Fail Me Now; In My Room; Seven Sisters; The Star Of The County Down; London Fields; Big Town; I'm No Angel
Todo en sensaciones, sentimiento a mas no poder, temas que te dan ese pellizco en el alma..la marca de lo bien hecho. Un grupazo y en especial un genial Bap Kennedy.
ResponderEliminarBesos.
Se fue muy pronto pero dejó la marca de lo que podía hacer. Al menos con un grupo que siempre será más de lo que se le valoró.
EliminarBesos