viernes, 26 de febrero de 2016

De Vinilos y Otras Glorias MDCXII

Recordemos cosas que nos hacían ser, cosas que ningún maestro pudo enseñar porque se sienten desde dentro, a pesar de repetirse muchas veces.


Pavlov's Dog (At The Sound Of The Bell) 1976


Como ya dijimos en este espacio sobre su álbum debut, una de esas extrañas ocasiones en las que el Prog. de calidad, del que te levanta la piel a jirones, se entroncó en los USA.
Pavlov's Dog nos vuelve a visitar con su segundo trabajo, que siguiendo la línea que marcaron cuando se dieron a conocer no desentona para nada de las bandas inglesas y del resto del Viejo Continente que enseñaron un nuevo tipo de sonidos para hacernos vibrar (al menos a los que nos gusta estremecernos con esto)
No sé cómo ni de qué manera pero hay lugares donde se coloca a la banda dentro del AOR, esa demencial manera de ser lo que no se podía e intentar vender una extravagante mezcla de Música "culta" con Hard venido a menos. En opinión del que escribe estas incoherencias mentales sobre vinilos, el grupo (¡¡afortunadamente, vive el cielo!!) está a años luz de esa idea, y este "At The Sound Of The Bell" no es sino una parte más del Prog. melódico y en ocasiones más ideado para mecer los sentidos.
Con la inigualable voz de David Surkamp, bella, embaucadora y en ocasiones brutalmente enamoradiza, todo entra de una manera dulce, suave, apoyadas las composiciones en arreglos de un nivel más que notable que te hacen soñar, especialmente en los temas donde la balada se mezcla con las cuerdas y la propia banda.
Disco para escuchar sin prisas, no iguala el nivel de su antecesor porque les salió una pequeña joya, pero en lo musical está donde uno quiera llegar más allá de los propios deseos, y en eso el disco cumple sin ningún problema.
En lo demás, contagia el ritmo y las ganas, las demostraciones de solos que los invitados manejan muy bien y esa calidad en el sonido, porque exceptuando la voz que está por encima de todo para resaltar esa especial textura que debe escucharse con ganas, el resto está donde debe y como debe.
Si se busca la Música para que te acompañe sin que nada esté en ese momento, este puede ser un buen disco, además no se pierde nada porque nadie va a enterarse de que somos distintos al resto.
David Surkamp voz, guitarras. Douglas Rayburn, mellotrón, bajo y percusión. Stephen Scorfina guitarra. David Hamilton teclados. Richard Stockton bajo. Thomas Nickeson guitarra y voces

1:  She came shining;  Standing here with you (Megan's Song);  Mersey;  Valkerie
2:  Try to hang on;  Gold nuggets;  She breaks like a morning sky;  Early morning on;  Did you see him cry



3 comentarios:

  1. Arrebatador y delicioso con un sonido que te hace suyo al momento sintiéndolo como si fuera solo para ti, y llegan desde luego, llegan.
    Besos

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    1. La voz de lo que no debería ser, sobreponiéndose a las melodías que todo lo cubren.
      Besos

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  2. ..una voz que culmina algo ya de por si genial.
    Besos.

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